terremoto
La familia del aragonés desaparecido en Nepal pierden la esperanza de que siga vivo
Se teme que quedaran sepultados bajo la avalancha de nieve y hielo que desencadenó el seísmo
Las familias de la pareja formada por la cántabra Isabel Ortiz y el aragonés Mixel Pizarro han asumido que los dos jóvenes pudieron ser víctimas del terremoto que asoló Nepal, en concreto mientras se encontraban en la zona de Langtang, una de las más castigadas por el seísmo.
Las informaciones recibidas en los últimos días mediante teleconferencia por los integrantes del equipo de especialistas de la Guardia Civil y de la Unidad Militar de Emergencias (UME) desplazados a Nepal para buscar a los españoles desaparecidos les han llevado a comprender y a asumir una situación que sospechaban ya desde hace varios días.
Estíbaliz Pizarro, hermana del joven Mixel, ha asegurado que los especialistas les habían «aclarado» todas las dudas que tenían sobre la situación de la ruta que tenía previsto llevar a cabo la pareja.
Estíbaliz y el resto de familiares preguntaron a los especialistas si habían «barrido» bien la zona situada más arriba de Langtang, porque en principio era allí donde los situaban a tenor de los datos que los propios jóvenes les habían comunicado la mañana del terremoto.
Los responsables de las labores de búsqueda descartaron que pudieran encontrarse en dicha zona ya que el impacto del terremoto había sido menor, sin apenas afecciones a los puentes y a los caminos y donde se han registrado tres víctimas en la aldea a la que tenían previsto llegar Mixel e Isabel para completar la jornada.
Estíbaliz agradece haber recibido «por fin» una información clara de la situación, pero al mismo tiempo afirma que estos datos han provocado que sus «esperanzas se vayan al traste».
Mixel e Isabel tenían previsto cubrir una ruta de unas cinco horas de duración desde la aldea en la que habían pernoctado hasta su lugar de destino.
Aunque Estíbaliz cree que tuvieron tiempo suficiente para atravesar Langtang, situado a tres horas del lugar del que habían emprendido la marcha, asume también que pudieron demorarse en la zona e, incluso, encontrarse en dicho punto con los cuatro asturianos que también permanecen desaparecidos.
Desde su llegada a Nepal, los especialistas han barrido tres veces en helicóptero la zona situada más arriba de Langtang y otras dos a pie, sin obtener dato alguno ni pistas que apunten a la posibilidad de que la pareja hubiera llegado a este punto.
Los testimonios recabados de los lugareños, añade Estíbaliz, en función de la información recibida de los especialistas, tampoco han aportado indicios sobre la pareja.
«Hay que mirar las cosas con objetividad -afirma Estíbaliz-, y aunque nosotros queremos una cosa, tenemos que valorar que ha podido pasar otra». Por esta razón, considera que Mixel e Isabel se encuentran debajo de la ancha lengua de hielo que devoró la zona de Langtang.