política
Podemos se enreda con el catalán
Tras plantearse incluir su cooficialidad en Aragón, y sin que todavía lo haya descartado formalmente, Pablo Echenique afirma que eso «no tiene ningún sentido»
El catalán se ha convertido en motivo de enredo interno para Podemos en Aragón a escasas semanas de las elecciones municipales y autonómicas. En el marco del proceso de participación ciudadana del que viene haciendo gala la formación de Pablo Iglesias, declarar la cooficialidad del catalán en Aragón apareció como una de las propuestas en firme para ser incluidas en el programa de gobierno de Podemos en esta Comunidad autónoma, cuya lista encabeza Pablo Echenique.
Tras desvelar esta información ABC, Podemos se apresuró a matizar que no era más que una propuesta ciudadana que debía ser objeto todavía de estudio y aprobación por parte de la dirección del partido para determinar si se incluía o no en el programa.
Ahora, conscientes de lo espinoso del asunto y de lo que puede erosionarles electoralmente en Aragón, desde la cúpula de Podemos se inclinan abiertamente por descartar que esa cooficialidad del catalán aparezca en su programa electoral –que todavía no han hecho público–.
El propio Pablo Echenique, en declaraciones al programa de Susana Griso en Antena3 , ha asegurado que «no tiene ningún sentido que se plantee una cooficialidad cuando en la mayor parte del territorio no se hablan las lenguas propias», en alusión a las modalidades específicas del Aragón oriental y de los valles del Pirineo.
Cuestión espinosa es también la denominación oficial que en Aragón se le dan a esas modalidades lingüísticas. Con el rechazo del PSOE, CHA e IU, el actual Gobierno aragonés PP-PAR aprobó hace un par de años la actual Ley de Lenguas que rechaza expersamente denominar «catalán» las modalidades del Aragón oriental. PSOE, CHA e IU sí que reclaman que se considere lisa y llanamiente esas variantes lingüísticas como catalán.
Al respecto, Pablo Echenique también ha perferido inclinarse por la ambigüedad. Preguntado sobre cómo deberían llamarse esas modalidades del Aragón oriental, ha afirmado que él las llama «catalán», pero a renglón seguido afirmó que «otras personas prefieren llamarlas de otar manera, y me parece muy bien».
La cuestión puede abrir un problema interno en Podemos: si la diercción del partido en Aragón que encabeza Echenique acepta la propuesta ciudadana aprobada en su plataforma de participación electoral, chocaría abiertamente con el discurso de su candidato al Gobierno regional; si la rechaza, atacaría una de las líneas de flotación esenciales de Podemos, la de la elaboración de estrategias, políticas y programas «participativos» respetando la voluntad de los ciudadanos que hacen uso de esos cauces que abre el partido.
En cualquier caso, lo que Echenique ha dejado claro es que apostarán por disparar el gasto público dedicado a la promoción de las lenguas propias de Aragón, las modalidades que quedan en valles pirenaicos y las variantes de las comarcas limítrofes con Cataluña. «El Gobierno de Aragón es el que menos gasta en la protección de sus lenguas propias, dos céntimos de euro por persona y año, mientras que Asturias, que es la penúltima, gasta 80 veces más. Nosotros vamos a proteger ese patrimonio y ese derecho», afirma Echenique.
Noticias relacionadas