POLÍTICA
Primera alianza «anti-PP» en Aragón con PSOE, Podemos, CHA e IU
Forman un frente judicial para intentar tumbar un proyecto sanitario de 450 millones de euros impulsado por el Gobierno de Rudi
El PP aragonés se enfrenta a su particular «frente de izquierdas» a menos de un mes de las elecciones. Solo unas horas después de que el secretario regional del PSOE y candidato al Ejecutivo autónomo, Javier Lambán, dijera que reniega de «pactos anti-PP», su partido ha consumado «de facto» una alianza judicial contra el Gobierno de Luisa Fernanda Rudi junto a Podemos, Chunta Aragonesista (CHA) e IU, a los que se han sumado los sindicatos CGT y Comisiones Obreras, así como varios colectivos y plataformas sociales críticos con el PP.
La oportunidad para esa alianza política la han encontrado en el proyecto de construcción del nuevo hospital público de Alcañiz (Teruel), controvertido desde que el Gobierno regional PP-PAR apostara por sacar adelante las obras mediante un contrato mixto público-privado.
No se privatizará la asistencia sanitaria, según ha insistido en remarcar el Gobierno de Rudi sin convencer a todo el bloque de la actual oposición parlamentaria –PSOE, CHA e IU– a la que ahora se le ha sumado Podemos. Los cuatro partidos, junto a CGT, CC.OO. y varias plataformas sociales presentaron ayer de forma coordinada doce recursos judiciales –uno por cada entidad recurrente y todos en la misma dirección– para tratar de tumbar el proceso de licitación que está en marcha para adjudicar las obras del hospital.
El PSOE prometió la construcción de este centro hospitalario cuando gobernaba en la Comunidad autónoma. De eso hace ya ocho años. Lo incluyó en sus compromisos electorales de 2007, pero se marchó del Ejecutivo autónomo sin haber cumplido con esa promesa.
El proyecto impulsado por el Gobierno regional PP-PAR establece que el servicio sanitario propiamente dicho seguirá siendo estrictamente público, pero amplía los servicios auxiliares que se privatizarán al amparo de este contrato de construcción, gestión de instalaciones y mantenimiento.
Por las obras de construcción del hospital se pagarán unos 120 millones de euros. El resto, hasta 451 millones, será el canon que el Gobierno aragonés tendrá que pagar año a año a las empresas que se hagan con el contrato. El abono será a razón de 15,4 millones de euros durante los veinte años que durara el contrato de gestión y explotación, del 2018 al 2037.
En gran parte, se trata de una operación financiera: inversores privados adelantan el dinero y lo recuperan a lo largo de veinte años con una rentabilidad determinada mientras explotan ciertos servicios no sanitarios de ese futuro hospital.
En víspera de elecciones
El Gobierno de Luisa Fernanda Rudi insiste en que es la fórmula más idónea para, ante las limitaciones presupuestarias, poder dotar a la zona de Alcañiz de un hospital moderno. PSOE, CHA, IU y Podemos rechazan el argumento y, al final, han encontrado en este asunto una ocasión para ir de la mano y ensayar posibles alianzas tras las elecciones del 24 de mayo. Una de las opciones que baraja el PSOE es que la suma de esos partidos de izquierdas puedan permitirle arrebatar al PP el Gobierno regional.
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