EJÉRCITO

Academia General: más de un siglo formando a la élite militar

Férrea disciplina, ejercicio físico y clases de formación militar y de Ingeniería nutren el día a día de los 952 cadetes de la Academia General Militar, una veterana institución

Academia General: más de un siglo formando a la élite militar FABIÁN SIMÓN

y. aznar

A las siete menos diez de la mañana tocan diana en la Academia General Militar. Arranca entonces una dura jornada de trabajo y estudio para los 952 cadetes de esta institución de la capital aragonesa, la única en España en la que se forman los futuros oficiales del Ejército y de la Guardia Civil.

«Educar, instruir y preparar moralmente a los futuros oficiales» es el lema que mueve a esta centenaria Academia. A Zaragoza llegó en 1927 y este año se cumple el 75 aniversario desde que Franco la reabriera allá por el año 1940. Sus orígenes se remontan a 1882 cuando se abrió por primera vez en el Alcázar de Toledo. Desde entonces, más de 23.000 cadetes se han formado en sus aulas.

En la Academia General Militar de Zaragoza los cadetes viven en régimen de internamiento, estudian una carrera universitaria y reciben adiestramiento militar. Todo bajo una férrea disciplina. «La vida del cadete es muy dura, pero tiene que ser así», explica el director de la Academia, el General Jerónimo de Gregorio y Monmeneu.

Por la mañana tienen seis horas lectivas del grado de Ingeniería de Organización Industrial. Es el Centro Universitario de la Defensa el que imparte el título y de ello se encargan profesores civiles. Este centro está adscrito a la Universidad de Zaragoza desde 2009, de esta forma los cadetes, además de la carrera militar, cuentan con un título universitario. Estudian, por ejemplo, matemáticas, física, inglés, estadística, derecho, mecánica, electrónica... Y a esto hay que sumar las asignaturas propias de la carrera militar y una hora de ejercicio físico todos los días, haga el tiempo que haga.

Además, una jornada a la semana o cada diez días se dedica por completo a la instrucción y el adiestramiento militar. Ese día no hay clases y salen al campo para aprender, por ejemplo, tácticas militares, tiro con fusil, manejo de armas, formación... Y a lo largo de la semana, entre otras cosas, aprenden a montar a caballo, tienen clases de esgrima y una vez al año, durante seis u ocho semanas, realizan salidas al campo para hacer maniobras.

«La carrera es dura y exigente; es un todo, se les dan unos conocimientos científicos, técnicos, humanísticos y militares», explica el Teniente Coronel Luis Dendariena, jefe de la Secretaría de Instrucción de la Jefatura de Estudios de la Academia General Militar. De ello se encargan unos 200 profesores, 110 civiles y el resto militares.

Todas las tardes las tienen libres para estudiar, hacer trabajos, acudir a tutorías, practicar deporte o salir a hacer recados a Zaragoza. Eso sí, hagan lo que hagan a los ocho y media tienen que estar cenando y a las once de la noche se pasa el último control nocturno. Para entonces todos tienen que estar de vuelta en la Academia. Y así día a día durante los cinco años que dura su formación militar.

No es fácil entrar a formar parte de esta prestigiosa institución. Por ejemplo, este curso hubo 1.275 solicitudes para los tres ejércitos –aire, tierra y armada– y la Guardia Civil. Y en la Academia de Zaragoza solo había 252 plazas vacantes.

Los requisitos que se necesitan son: ser menor de 20 años, tener la nacionalidad española, contar con la selectividad aprobada, pasar unas pruebas físicas y tener un buen nivel de inglés. Si se cumple con todos estos puntos es la nota media entre el bachiller y la selectividad la que fija el límite de entrada. Este curso, se necesitaba tener de media una nota de 9,5.

De los 952 cadetes, hay 47 mujeres, en torno a un 5% del total. Además, hay alumnos extranjeros que estudian en la Academia Militar de Zaragoza, gracias a los convenios de colaboración con otros países. En estos momentos hay siete alumnos que vienen de Jordania, Tailandia, Perú y Corea.

Por sus aulas han pasado tres reyes. El Rey Alfonso XII fue quien puso en marcha la primera Academia General Militar en España. Lo hizo el 20 de febrero de 1882 en el Alcázar de Toledo y el propio monarca recibió formación en sus aulas. Sería su bisnieto, el rey Juan Carlos I el siguiente monarca en formarse en la Academia. Lo hizo ya en la capital aragonesa, entre los años 1955 y 1957.

Tres décadas después de su padre, desembarcó en Zaragoza como cadete el entonces Príncipe Felipe. Comenzó sus estudios militares en la Academia el 1 de septiembre de 1985 y el 11 de octubre de ese mismo año juró bandera en este centro. Durante un año fue alumno junto a más de 200 futuros oficiales de su promoción, la XLIV de la Academia General Militar. La camareta en el que Felipe VI durmió durante un año sigue igual que entonces.

Academia General: más de un siglo formando a la élite militar

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación