sociedad
Teruel, en busca del rincón más gélido de España
Extienden estaciones termométricas en localidades del conocido como «Polo de frío de España», el área triangular comprendida entre Teruel, Calamocha y Molina de Aragón
El «Polo del frío de España». Así se conoce desde hace años a la porción peninsular delimitada por el triángulo que forman Teruel capital, la turolense localidad de Calamocha y el municipio de Molina de Aragón que, pese a lo que reza su topónimo, pertenece a la provincia de Guadalajara.
Históricamente, este territorio acostumbra a arrojar las temperaturas más frías de España. Y, ahora, se quiere rizar el rizo buscando cuál es su rincon más frío o, al menos, el que cada año arroja la temperatura más gélida.
El proyecto lo han lanzado un grupo de apasionados de la meteorología y de las curiosidades asociadas a ella. Han bautizado a su estudio «Los polos del frío» y ya ha empezado a dar sus primeros resultados.
Han extendido una red de estaciones termométricas –y más que prevén instalar en el futuro– por las localidades turolenses de Mosqueruela, Valdelinares, Alcalá de la Selva, Cedrillas y Monteagudo del Castillo. Y, con los registros que han quedado en los últimos meses, es precisamente esta última localidad la que este invierno encabeza el ránking del frío extremo en España: el pasado 8 de febrero Monteagudo del Castillo llegó a los 17,1 grados centígrados bajo cero. En el resto de esas localidades, aquel día se alcanzaron termperaturas de entre -12,9 y -16,9 ºC.
Pese a lo gélido de la estadística, los registros históricos demuestran que esta tierra puede dar mucho más de sí en lo que a heladas se refiere. En Calamocha, por ejemplo, se llegó a registrar una temperatura de 30 grados bajo cero el 17 de diciembre de 1963.