Ya son siete las farmacias cerradas por fraude en Aragón

La trama de fraude en farmacias deja ya siete boticas cerradas en Aragón por orden judicial y el arresto de sus propietarios, varios de los cuales permanecen en prisión por estos hechos. El juzgado de Teruel que instruye el caso desde hace meses investiga una presunta trama de fraude consistente en la reventa de medicamentos que previamente esas farmacias cobraban a la Sanidad pública presentando recetas falsas. Con esas falsas recetas, presuntamente, engañaban a la Administración haciendo ver que las habían dispensado, cuando en realidad no habría sido así. Eso les permitía cobrar por esos medicamentos y luego volver a venderlos.

El caso se destapó en la localidad de Palomar de los Arroyos (Teruel). Fue la primera farmacia intervenida por la Guardia Civil por orden judicial, y su propietaria detenida. Es una de las personas implicadas que permanece en prisión provisional.

La investigación fue tirando del hilo y ha ido dando con más farmacias que presuntamente habrían realizado las mismas prácticas fraudulentas. Hace unas semanas se arrestó a los farmacéuticos de Cariñena (Zaragoza) y de las localidades turolenses de Monroyo y Peñarroya de Tastavins, boticas que también fueron cautelarmente clausuradas.

Y esta semana la operación se ha extendido a otras tres localidades de la provincia de Teruel, también con el cierre de sus respectivas farmacias y el arresto de sus propietarios. Se trata de las boticas de Arcos de las Salinas, Villafranca del Campo y Mosqueruela.

A los arrestados por esta presunta trama se les imputan los delitos de estafa, falsedad documental, balnqueo de capitales, contra la salud pública, contra Hacienda y la Seguridad Social.