Primera decisión del nuevo alcalde de Benidorm: no baldear con agua potable
A partir de ahora las concesionarias utilizarán agua depurada y no potable, que tomarán de la boca de riego ubicada en El Trinquet
El nuevo alcalde de Benidorm, el popular Toni Pérez, ha tomado entre sus primeras decisiones tras llegar al cargo dejar de baldear las calles de la ciudad con agua potable.
Pérez se ha incorporado hoy al despacho de alcaldía tras ser investido alcalde el pasado sábado al frente de un gobierno en minoría.
En declaraciones a los periodistas, ha explicado que a partir de ahora las concesionarias utilizarán agua depurada y no potable, que tomarán de la boca de riego ubicada en El Trinquet.
Actualmente se está a la espera de que en los próximos días se instalen otras cuatro tomas de este tipo de agua en distintos puntos de la localidad para el mismo propósito.
Pérez se ha reunido, por un lado, con el PSPV-PSOE y Ciudadanos (C's) para tratar cuestiones de organización municipal y espacio, y también con los representantes de los trabajadores municipales.
A la espera de poder cerrar, previsiblemente a finales de mes, la organización de su gobierno, este lunes ya ha repartido las tenencias de alcaldía, siguiendo el orden de la lista electoral a partir de Ana Pellicer.