tribunales
Casi tres años de cárcel por disparar «para amedrentar» al hijo de su pareja
La acusación pedía condena por intento de homicidio, aunque no ha podido probarse que disparase en dirección a la víctima
Un hombre ha sido condenado a una pena de dos años y diez meses de cárcel por amenazar a tiros al hijo de su compañera sentimental a las puertas de un bar de Alicante, durante una de las múltiples discusiones violentas que mantenían porque la víctima no veía bien dicha relación.
La sección segunda de la Audiencia Provincial de Alicante ha absuelto al acusado de un delito de homicidio en grado de tentativa, por el que la Fiscalía pedía para él 7 años y 4 meses de condena, al creer que no ha quedado probado que tuviera intención de matar al perjudicado ni tampoco que llegara si quiera a disparar contra él.
Los hechos ocurrieron el 20 de julio del pasado año, cuando la víctima se dirigió al bar que regenta el procesado en la calle Periodista Bas Mingot de la ciudad, donde comenzó a discutir con su madre y se encaró con el dueño del establecimiento.
A continuación, salió del establecimiento pero el condenado cogió una antigua pistola que ocultaba en el bar y salió en su busca a la calle, donde disparó «hacia el frente, a unos metros de donde se encontraba la víctima» a fin de «amedrentarla y como advertencia», según se establece en la sentencia, hecha pública hoy.
La bala acabó impactando contra la tapa del depósito de combustible de un coche que estaba estacionado en la calle en tanto que el hijo salió corriendo aterrorizado y denunció los hechos en la comisaría más cercana.
La Policía detuvo al autor del disparo y se incautó del arma, una pistola sin número de serie dada su gran antigüedad, y tres proyectiles junto a una cámara frigorífica ubicada en el bar.
El tribunal ha impuesto al acusado, que fue trasladado desde prisión a la Audiencia para asistir al juicio el pasado 18 de mayo, un año de prisión por un delito de tenencia ilícita de armas y otro año y diez meses por un delito de amenazas graves, mientras que también deberá indemnizar a la víctima con 3.000 euros por el cuadrado ansioso-depresivo sufrido.
Considera la sala que no puede condenar al sospechoso por tentativa de homicidio porque no ha quedado acreditado que tuviera intención de matar al hijo de su compañera sentimental.
«De los testigos que depusieron en el acto del juicio, no hay ninguno, salvo el perjudicado, que afirme que el disparo se produjo hacia donde él estaba situado», argumentan los magistrados.
