opinión
Apoyos a la internacionalización
Llevar de la mano a las empresas alicantinas en sus primeros pasos en el exterior sería, sin duda, el mejor camino
Recientemente leía el informe mensual del ICEX correspondiente a febrero 2015 sobre comercio exterior. Y los datos no están nada mal en nuestra provincia, con un incremento en los dos primeros meses del año del 5,8% en exportaciones y 15,4% en importaciones y un saldo positivo (exportaciones menos importaciones) para la economía alicantina superior a los 200 millones de euros, con crecimientos relevantes en exportaciones a Alemania, Reino Unido, Estados Unidos, Países Bajos, Suiza o México, llamando la atención el ligero descenso de nuestras exportaciones a China (que es nuestro primer proveedor), o la posición irrelevante de las dirigidas a Rusia y, en general, a los países del Este.
Una primera conclusión es que para nuestras empresas el sector exterior funciona, y una segunda, aún más interesante, es que seguimos teniendo muchas oportunidades de crecer.
En ocasiones he escuchado a empresarios decir que los países del Este están muy lejos para plantearnos exportar, ¡y sin embargo parece que no lo están para importar!. La logística hace tiempo que dejó de ser un problema y si no lo es para importar, tampoco debería serlo para exportar. La clave, como siempre, está en identificación de necesidades en segmentos de población de aquellos países que podamos cubrir con nuestros productos de manera competitiva. Y son países con clases medias emergentes, buenas expectativas de crecimiento y muchas necesidades por cubrir.
La internacionalización es fundamental para iniciar la recuperación, sobre todo cuando identificamos correctamente las regiones con capacidad de crecimiento. Pero tampoco nos podemos engañar. Internacionalizarse no es fácil, sobre todo para las empresas pequeñas, que constituyen la mayor parte de nuestro tejido empresarial.
Es cierto que existen determinadas subvenciones para favorecer el comercio exterior. Pero más allá de esas subvenciones, lo realmente importante es contar con la orientación integrada de los diferentes organismos que tienen entre sus funciones apoyar la salida de nuestras empresas al exterior: identificación de países y clientes potenciales, establecimiento de mecanismos de cooperación entre PYMES en origen y apoyos en destino, con máxima eficiencia en los recursos invertidos. Unir fuerzas entre el ICEX, las Cámaras de Comercio y las Embajadas, y llevar de la mano a las empresas alicantinas en sus primeros pasos en el exterior sería, sin duda, el mejor camino.
Javier Fur es presidente del Círculo de Economía de Alicante