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Cinco rutas para disfrutar de Alicante en bicicleta
El otoño y su suave clima son los complementos parfectos para descubrir rincones pintorescos de la provincia entre pedaladas
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12345Alcoy-Font de Mariola-Montcabrer
Foto: www.3enruta.com Una ruta que puede ser practicada casi por cualquier ciclista mínimamente avezado. Sin una gran dificultad técnica y con una exigencia física bastante asequible, puede ser una buena excursión a nivel familiar. Pese a ser asumible por unas piernas no especialmente duchas en el pedaleo de montaña, tampoco alguien totalmente desentrenado debe confiarse y lanzarse a ello. La salida, desde el núcleo urbano de Alcoy, se realizaría en dirección a Banyeres de Mariola. Tras abandonar la población, deberemos dirigirnos a Barxell, pedanía tras la cual el camino enfilará ya Mariola.
La ruta bordeará la provincia de Valencia, pero sin llegar a entrar en ella. La zona de Mariola primero, y Mas de la Foia, después de una ancha senda con un fuerte desnivel, serán el ecuador del camino. Ese tramo ofrecerá, además, unas fantásticas vistas en altura. La Lloma del Cavall, la Font de la Carrasca, el «barranc del Paraets»... Un paraje único a la vista, perfecto para atravesar a lomos de una bicicleta. Más de 30 kilómetros en total, en función de qué sendas se sigan, y un desnivel de más de 500 metros a salvar. Una ruta ligera y agradable para hacer de un día libre una experiencia deportiva.
Cumbre Benicadell
Foto: www.3enruta.com Posiblemente, una de las rutas más bonitas a nivel paisajístico en toda la provincia. Pero también una de las más duras para las piernas. Habrá que tener una buena forma física para aguantar esta senda pero, sin duda, valdrá la pena. Unos 33 kilómetros, un desnivel máximo de 700 metros pero muchos picos, cuestas, subidas y bajadas que harán que sea todo un desafío para el que habrá que entrenar previamente. Gaianes, Muro de Alcoy, Beniarrés y las montañas de Benicadell: un trapecio para disfrutar y sufrir a partes iguales.
La salida será desde la población de Muro de Alcoy. En dirección a la vieja carretera del puerto de Albaida se encuentra la senda, que discurrirá hacia el barranco de Fontanars. Desde el primer momento el camino seguirá una línea ascendente de forma progresiva, con tramos más y menos duros pero sin dejar de subir. Entre los kilómetros 11 y 17 viene la acción: duros ascensos a los que seguirán vertiginosas pendientes, que volverán a subir poco después. Sufrimiento para las piernas, pero disfrute para la vista y los pulmones: aire fresco y paisajes inigualables. Superado ese punto, llaneando y bajando casi sin pedalear hasta que las señales vuelvan a indicar Muro de Alcoy.
Arenales del Sol-Gran Alacant-Santa Pola
Foto: www.3enruta.com Tres núcleos de población muy cerca de las dos principales ciudades de la provincia: Alicante y Elche. Incluso, cualquiera de ellas puede servir como punto de salida para aquellos que no teman alargar un poco más la tirada. Buenas vistas y brisa marina en la cara para hacer una ruta que tiene un poco de todo: la mejor forma de hacerla, probablemente, sea variando el camino de ida del de vuelta. Arenales y Santa Pola están a apenas ocho kilómetros de distancia, conectados por la conocida como «carretera del faro»: un bonito camino que discurre prácticamente por encima del mar, llano pero con el inconveniente del tráfico.
La variante se encuentra en el paso por Gran Alacant. Subidas y bajadas para disfrutar del Mediterráneo desde las alturas. Las cuestas, no especialmente pronunciadas y poco prolongadas, son bastante accesibles incluso para aquellos desentrenados que decidan echarle ganas. El camino es liviano y facilón, pero la posibilidad de un baño en el mar, una cerveza a pie de playa o un paseo por la orilla con la bicicleta a buen recaudo son suficiente aliciente para animar a cualquiera.
La ruta de los ocho pueblos
Foto: www.3enruta.com A través del Valle de la Gallinera transcurre la conocida como «ruta de los ocho pueblos»: Benirrama, Benialí, Benitaia, Benissiva, La Carroja, Alpatró, Benissili y Llombai. Desde la fuente de Benimarxot, en el primer punto, hasta la fuente de la Mata; casi en paralelo al río Gallinera transcurre esta senda, de alrededor de 16 kilómetros que puede, incluso, hacerse caminando. Un camino tranquilo, apto para toda la familia que podrá completarsee sin sobresaltos ni sufrimiento excesivo.
Poco desnivel a lo largo de la no demasiado dilatada distancia del camino, para disfrutar del entorno, las vistas y la naturaleza. El Valle de la Gallinera, en la comarca de La Marina Alta, es cuna de algunas rocambolescas historias y lugar de paso casi obligatorio para amantes del ciclismo y el senderismo. Un camino lleno de fuentes y bellas estampas para inmortalizar de forma pausada y entretenida pedalada a pedalada.
Alcoy-Cruz de Onil
Foto: www.3enruta.com Una ruta algo más extensa que el resto, con tramos de cierta dificultad técnica. Pese a ello, todos los públicos podrán disfrutar de ella: las partes complicadas son breves, por lo que podrán ser solventadas a pie, para así no renunciar al disfrute de todo el resto del camino. A espaldas de la Font Roja, con Onil como punto de destino, Polop y su ermita serán un punto de paso intermedio perfecto para llanear y disfrutar de las vistas.
Éstas serán todavía más espectaculares llegados a la Cruz de Onil. Con la ciudad a los pies y la Carrasqueta a tiro de piedra, el camino estará en su ecuador, y a partir de entonces empezará una pequeña montaña rusa. De vuelta, a pocos kilómetros de Alcoy, habremos descendido cerca de 400 metros en apenas unas pedaladas: tramo rápido para prepararse mentalmente para una última subida, algo más suave pero también mas prolongada, que sea el preludio del fin.