sucesos
Finestrat realizará obras de emergencia para consolidar el macizo de la Peña
Las obras se ejecutarán en dos meses y están valoradas en unos 240.000 euros, de los que la Diputación de Alicante asume 180.000
El Ayuntamiento de Finestrat va a realizar «obras de emergencia» para estabilizar y consolidar la Peña, el macizo rocoso sobre el que se asienta parte del casco antiguo, después de que un informe técnico haya señalado que el talud ha perdido estabilidad.
Estas obras, que darán también firmeza a las viviendas situadas entre los números 21 y 27 de la calle Fondo, fueron aprobadas por un decreto de Alcaldía el pasado 26 de septiembre y ratificadas esta semana en pleno por unanimidad.
Según el informe elaborado por el arquitecto técnico municipal, «la pérdida de estabilidad del talud supone un grave peligro por la conexión de las edificaciones y por la proximidad de la carretera CV-761».
Además, alerta que estas obras son la única alternativa ya que «no es posible tomar medidas cautelares de contención ni del deterioro ni de la edificación que detengan la evolución del desplome».
El portavoz del gobierno local, Juan Francisco Pérez, ha explicado que la obra se va a centrarse en «sujetar al macizo la roca del talud que está suelta».
Además, se ha ofrecido a los propietarios la posibilidad de que aprovechen estas obras para hacer «una correa de cimentación dentro de la roca para dar mayor estabilidad a sus viviendas».
Pérez ha indicado que las obras se ejecutarán en dos meses y están valoradas en unos 240.000 euros, de los cuales la Diputación de Alicante asume 180.000.
El portavoz municipal ha recordado que el Ayuntamiento lleva desde el año 2009 tomando medidas para «minimizar los riesgos de desprendimientos», siguiendo las directrices de un estudio encargado a la Universidad de Alicante.
Así, progresivamente se han ido renovando las conducciones de agua para evitar que haya fugas que afecten a la Peña y se ha eliminado la vegetación del macizo.
Además, desde el Ayuntamiento se realizan inspecciones periódicas de las viviendas situadas en la Peña.
Según Pérez, «las que están ocupadas no presentan problemas», si bien una casa de la calle Fondo que no está ocupada ya fue declarada en ruinas y otra está en trámites.
Pérez ha adelantado que el próximo año se harán más actuaciones en la misma zona.
El último desprendimiento tuvo lugar en enero de 2012 y obligó a cortar al tráfico un tramo de la CV-761, aunque no causó daños personales.