«Mis hijos tienen pesadillas y dicen que se les cae el techo encima»

Lo primero que ven cada mañana al despertar Andrés y Luis, dos hermanos gemelos de seis años, es un gran agujero en el techo de su habitación que deja entrever unas viejas vigas de madera llenas de polvo, humedad y telas de araña. Al levantar la cabeza encuentran un cuarto apuntalado. «¿Seguro que no se caerá el techo esta noche, mamá?», preguntan desde hace meses antes de dormir. Sonia García Olvera, la madre de los pequeños, no puede responderles porque sobre su cabeza ronda la misma inquietud, al igual que por la de los ocho inquilinos que residen en el número cinco de la calle Encarnación, en el barrio de la Viña. La finca cuenta con un informe técnico de Procasa que califica la Inspección Técnica de Edificios (ITE) como desfavorable y concede al propietario un máximo de 120 días para realizar las obras de mejora necesarias en la fachada, el zaguán, y el patio principal donde hay que consolidar los revestimientos sueltos y reforzar o sustituir las galerías además de las reparaciones del interior de las viviendas.

Sin embargo, los vecinos aseguran que a pesar de que han intentado ponerse en contacto con el propietario, para que realice las obras necesarias cuanto antes, no han obtenido respuesta. Casi el edificio en su totalidad se encuentra apuntalado y los vecinos temen que pueda ocurrir «una desgracia». «Mi sobrino estaba jugando en la azotea y el pie se le hundió en el suelo», cuenta Sonia García cuya vivienda es una de las más afectadas. En este caso, el incidente sólo quedó en un susto pero temen que si vuelve a repetirse sea aún peor. «Los niños tienen pesadillas. Se les cae el techo encima», asegura, y es que sus hijos duermen entre puntales y con un gran agujero el techo.

Por ello, los vecinos han decidido denunciar la situación y han pedido al Ayuntamiento que medie para que el propietario haga «cuanto antes» las obras necesarias. «No tenemos dinero para irnos a otro lugar pero tenemos miedo del mal estado en que está la casa». Mientras que esta situación ya fue denunciada por el PSOE local, que lo consideró un incumplimiento de la «política de disciplina urbanística» por parte del Equipo de Gobierno, desde el área de Urbanismo del Consistorio gaditano aseguraron que desde enero de 2008 están realizando «todas las tramitaciones que permite la normativa urbanística».