Las compañías eléctricas ingresarán 287 millones de euros extra al año gracias a la última subida de tarifas aprobada por el Consejo de Ministros, que entró en vigor el pasado 1 de julio, de acuerdo con un estudio elaborado por la Comisión Nacional de la Energía (CNE). Con arreglo a esa medida, el recibo doméstico de la luz se encareció un 0,8%, que se añadiría al aumento del 4,48% que registró el 1 de enero. En el caso de los grandes consumidores industriales, el incremento acumulado en lo que va de año superaría ya el 11%, tras el 5% adicional incluido por el Gobierno en la citada revisión. El aumento medio en la tarifa eléctrica fue del 1,38%, frente al 5% que habían pedido las eléctricas para paliar su déficit histórico en ese apartado (diferencia entre los ingresos que obtienen vía recibos y los costes reconocidos por los servicios que prestan), que sólo en 2005 alcanzó los 3.810,5 millones. Esos números rojos -las tres cuartas partes de los cuales corresponden a Endesa e Iberdrola-, tienen como causa, entre otras, el mal funcionamiento del mercado mayorista, argumenta el Ministerio de Industria.
Según las cuentas hechas por la CNE, la cifra que obtendrán las eléctricas en el segundo semestre con la última revisión tarifaria alcanzará los 163 millones, que habrá que añadir a las ingresos que ya tenían presupuestados estas compañías antes de saber cuánto iban a poder subir sus precios este año. La Comisión recuerda, además, que las distintas cuotas aplicables a los recibos se mantienen inalterables, salvo en lo que se refiere a la moratoria nuclear.