Unas 5.000 personas despidieron en Torrent a los 18 vecinos del municipio que perdieron la vida en el accidente de metro ocurrido el lunes en Valencia, en la misa-funeral oficiada por uno de los obispos auxiliares de Valencia Salvador Giménez, quien comenzó explicando que «no están todas las familias porque es tanto el dolor que algunos no pueden recibir el pésame otra vez». A la ceremonia asistieron el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, el vicepresidente del Consell, Víctor Campos, otros miembros del Consell, el delegado del Gobierno, Antoni Bernabé, y alcaldes de otras poblaciones. / E. P.