-¿Por qué decidió hacese cargo de este establecimiento en el año 2004?

-Principalmente fue porque no es nada fácil encontrar en la actualidad trabajo en esta ciudad y más a mi edad. Así que, tras pensármelo mucho, decidí invertir parte de los ahorros familiares en este negocio aunque está la cosa hoy en día muy flojita.

-¿Qué tipo de productos puede encontrar el jerezano en Pipi Lotta?

-Pues sobre todo ropa para bebé aunque para premamá tenemos todo lo que uno necesite además de otros complementos que requiera un niño de menos de 3 años. Asimismo, tenemos carritos de bebé, cunas y una serie de productos que poco a poco vamos ampliando ya que queremos que aquí cualquier madre puede encontrar todo lo que necesite su hijo.

-Dicen que en los últimos años ha subido el índice de natalidad en la ciudad, ¿lo nota usted en su negocio?

-Sí, es cierto que se nota que ha subido el número de mujeres que deciden tener hijos pero hay mucha competencia. La gente se apaña mucho con las grandes superficies y con el rastrillo.

-¿Qué tipo de ropa prefieran los jerezanos para vestir a sus bebés?

-En Jerez hay todavía una gran tradición a la hora de vestir a los más pequeños de la casa. La ropa de corte clásico es la que más se vende aunque nosotros preferimos la ropa un tanto más modernita por lo que intentamos tener siempre este tipo de ropa. Parece, en este sentido, que cerraron las puertas de Jerez con la llegada de la modernización

-¿Qué es lo que más le gusta de este negocio?

-Pues la verdad es que me gusta todo. Tratar con la gente que se acerca hasta aquí. De hecho lo primero que yo monté en Jerez nada más llegar a la ciudad fue un bar, aunque tras trabajar muchas horas para sacarlo adelante tuve que cerrarlo.

-¿Goza de buena salud el comercio en el centro?

-Bueno, en las calles principales del centro sí, pero en el resto no.