«Nuestro objetivo es ganar el mundial». De esta forma contestó el presidente del grupo Santander, Emilio Botín, a un accionista que le pidió que el banco lo gane todo «como el Barça, y que no le pase lo del Real Madrid». La asamblea de propietarios de la primera entidad financiera del país fue este año más corta y tranquila que en anteriores ocasiones. La única nota discordante la pusieron un grupo de cuatro accionistas, capitaneados por el antiguo consejero de Banesto Rafael Pérez Escolar, que en todas las convocatorias muestran su absoluta oposición al equipo gestor.

Sostuvieron que el quórum de la junta era incorrecto, atacaron al consejero delegado y criticaron las cuentas. Además de aprobar los resultados y dividendos del año pasado, los accionistas dieron luz verde a la entrada en el consejo de Jay Sidhu, presidente del Sovereign. A cambio, Botín y Juan Rodríguez Inciarte formarán parte del órgano de gobierno de la entidad norteamericana. Los propietarios renovaron el mandato de Alfredo Saénz, Ana Patricia Botín, Fernando de Asúa, Rodrigo Echenique y Lord Burns como administradores.