La visita del líder del PP, Mariano Rajoy, y del presidente del PPC, Josep Piqué, a Granollers acabó ayer tarde con nuevos altercados, ya que un centenar de jóvenes independentistas insultaron a los dirigentes populares, que tuvieron que salir protegidos por la policía tras ofrecer un mitin.
Durante el acto, tanto Piqué como Rajoy acusaron al primer secretario del PSC, José Montilla, y al presidente de ICV, Joan Saura, de alentar este tipo de actos de boicot en contra el PPC. Antes del mitin ya se habían producido protestas de este mismo grupo.
Si hace unos días Rajoy fue abucheado en un mercado de Hospitalet de Llobregat, la visita de ayer del líder del PP a Granollers estuvo marcada por la tensión, puesto que tuvo que abandonar la ciudad en una furgoneta del partido mientras un grupo de jóvenes, entre los que había algunos de estética okupas, le insultaban y lanzaban algunos huevos.
Algunos de estos jóvenes se enfrentaron después con una veintena de Mossos d'Esquadra por las calles adyacentes al teatro.
Horas antes del inicio del mitin, varias decenas de los jóvenes que después provocarían los incidentes se habían concentrado a las puertas del teatro con cacerolas y silbatos, y habían roto un cristal. Al ver a ese grupo de jóvenes, que llevaban pancartas con lemas como Por la paz en Euskadi, PP basta o Rajoy fuera de Granollers, Rajoy y Piqué entraron al recinto por una puerta lateral.
En su intervención, Piqué cargó contra el líder de ICV, Joan Saura, al que llamó «personaje antidemocrático», y a Montilla, del que dijo que «no puede ser presidente de la Generalitat» por basar su política «en el enfrentamiento entre nosotros».
Por su parte, Mariano Rajoy descalificó el proyecto de nuevo Estatuto porque «divide a la sociedad» y se ha hecho sin el suficiente consenso. Rajoy destacó que «el primero y más importante defecto que tiene este Estatuto de autonomía es que, por primera vez desde 1978, por primera vez desde la democracia, es un Estatuto de autonomía que unos pretenden imponer sobre otros». El presidente del PP pidió por ello a «todos los catalanes» que digan claramente que no aceptan el proyecto de nuevo marco de autogobierno, porque es «anticonstitucional» y va «en contra» de los propios intereses de Cataluña.