La voz Digital
Viernes, 9 de junio de 2006
  Alertas   Envío de titulares    Página de inicio
PORTADA NOTICIAS ECONOMÍA DEPORTES OCIO CLASIFICADOS SERVICIOS CENTRO COMERCIAL PORTALES


PORTADA
Opinion
Trabajar para ser feliz
Imprimir noticiaImprimirEnviar noticiaEnviar

Publicidad

Debido a mi trabajo, a diario me relaciono con personas de todo tipo y que desempeñan labores muy, pero que muy, dispares. Desde electricistas a políticos, pasando por profesores, estanqueros, anticuarios, empleados de la construcción o de grandes superficies comerciales... un sin fin de personas que intentan ganarse la vida y ser felices en esta ciudad donde todo se magnifica de forma espectacular.

A todas estas personas sólo les importa alcanzar las metas que en un momento determinado de sus vidas se marcaron y, sinceramente, que Pilar Sánchez o Pedro Pacheco se tiren constantemente los tratos a la cabeza sólo les aburre.

A través de esos objetivos que se plantean en la vida o de la profesión que están desempeñando y el por qué de ello se pueden llegar a conocer muy bien a las personas.

Recuerdo a cierto bombero, al que sólo conocía porque habíamos coincidido en un par de ocasiones en reuniones de amigos comunes, al que un día le pregunté por qué había decidido dedicarse a esa peligrosa profesión y su respuesta me hizo darme cuenta de que tal vez si que podíamos llegar a ser grandes amigos (porque sinceramente antes de eso pensaba que era un musculitos sin cerebro que sólo le interesaba lucir brazos).

Lo que me dijo da igual, sólo me descubrió que el refrán de que «las apariencias engañan» es totalmente cierto y que siempre hay una historia detrás de cada trabajador que al menos merece ser contada y escucha, y cuando digo trabajador me refiero a eso: trabajadores, me da igual que cobre 240 euros (que los hay y muchos) o 3.000 euros al mes.

Alejandra Ramírez. Jerez



Sudoku Canal Meteo Horóscopo
Vocento