El portavoz de la ilegalizada Batasuna, Arnaldo Otegi , opinó ayer que el Gobierno está experimentando «un cambio» y comienza a aceptar que el País Vasco constituye «una realidad nacional», lo que consideró como «una gran victoria política». Otegi hizo esta reflexión en una conferencia sobre el proceso de paz en Andoain (Guipúzcoa), donde anunció que su formación ha remitido al resto de los partidos un calendario y un guión con «contenidos» para alcanzar un «primer acuerdo» sobre la constitución de una mesa de diálogo político. Indicó que ha llegado el momento de «abandonar el tablero de la confrontación» y sustituirlo por el de la «seducción», en el que cada opción política pueda «intentar convencer» a la sociedad vasca de la idoneidad de su proyecto.

El portavoz de Batasuna explicó que hasta ahora el Estado había permanecido en una «trinchera» que ahora está «abandonando», ya que «es muy difícil mantener como posición política ante este pueblo que no es una comunidad nacional, que no es una realidad nacional, que no es una nación» y además resulta «muy difícil mantener que los vascos no tienen derecho a decidir».