El titular del juzgado de instrucción número 2 de Palma, Juan Ignacio López, ordenó ayer prisión para M.N.R.L., de 39 años, madre del niño adoptado de 6 años, en coma tras sufrir una brutal paliza, y dejó libre al padre, J.R.M., de 44 años, con una orden de alejamiento del menor.

Según afirmaron fuentes cercanas al caso, parece ser que la la mujer ha admitido ser la culpable de las gravísimas lesiones que han llevado a su hijo adoptivo al coma profundo.

Su marido, que tiene la condición de imputado en los hechos, ha quedado en libertad sin cargos y sin fianza pero con la obligación de comparecer ante el juez los días 1 y 15 de cada mes.

El menor está estable dentro de la gravedad, en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital materno-infantil de Son Dureta, donde ingresó el pasado martes después de que sus padres intentaran que lo atendieran primero en una clínica privada.

Adoptado con dos años

Los médicos del centro privado avisaron a la policía ante la gravedad de las lesiones que presentaba el niñor, informó hoy un portavoz policial. Varios agentes del grupo de homicidios se trasladaron al la clínica particular y detuvieron a la pareja después de conocer su versión de los hechos y observar que las heridas del niño no se correspondían con el relato que hicieron.

Este exámen del pequeño y la información facilitada por los médicos que le trataron permitió a los policías determinar que sus lesiones no podían haberse generado por una caída, como alegaron los padres, sino que parecían producto de malos tratos. La Jefatura Superior de Policía de Baleares emitió un comunicado ayer que indica que los detenidos han negado haber agredido al niño y ser los responsables de sus lesiones.

El pequeño fue adoptado cuando tenía dos años y todos los informes de seguimiento del proceso de adopción hechos desde entonces fueron "evaluados de manera satisfactoria", según el Instituto de Servicios Sociales y Deportivos de Mallorca (S'Institut).

Al parecer, el proceso de adopción del pequeño empezó en 1999 y el último informe de seguimiento data de julio de 2003, de acuerdo con lo establecido por la legislación del país de origen del menor. Según esta institución, una vez terminado este proceso, un menor adoptado "es plenamente equiparable en derechos a cualquier hijo biológico", por lo que la Administración "sólo tiene potestad para intervenir en los casos de desprotección legalmente establecidos".

El Instituto de Servicios Sociales y Deportivos de Mallorca añade en la nota que en el momento en que ha tenido conocimiento de la situación del pequeño ha iniciado "un expediente de protección", como "se hace en cualquier caso en el que hay desprotección".