Lejos de lo que se pueda pensar la inmensa mayoría del xerecismo, el futuro de Vicente Moreno no está claro, pues ni tan siquiera el propio afectado sabe qué ocurrirá la próxima temporada. «Tengo muy claro que el fútbol se mueve por momentos y, vista la experiencia de otras temporadas, soy incapaz de afirmar nada. Hay que vivir el presente porque en el fútbol los contratos valen para poco, eso se está viendo cada día. Aquí hay que vivir el presente y nada más. Yo particularmente ya no me atrevo a hablar del futuro que va más allá de mañana. Sí, tengo contrato, pero visto como está el fútbol no me atrevo a vaticinar nada sobre mi futuro» comentó ayer el capitán del Xerez.
Para Moreno sería una sensación muy extraña verse con otros colores. «Después de seis años con esta camiseta, a día de hoy no me imagino con otra, pero vuelvo a repetir que no me he parado a pensarlo y tampoco sé lo que piensa el club. Será cuestión de hablarlo con el secretario técnico y ver el futuro por donde pasa. Ahora mismo no me planteo absolutamente nada. Ni cumplir mi contrato, ni no cumplirlo». Con esto no quiere decir que su «etapa en el Xerez haya terminado, pero sí digo que aún no sé lo que piensa el club, no tengo ni idea, y habrá que esperar a que el secretario técnico hable con nosotros. Llevo seis años aquí estupendos, pero no sé qué es lo que tiene en mente el club. Los que tenemos contrato tenemos que esperar a escuchar al Xerez, para luego ver que es lo que tenemos que decir también nosotros».
BALANCE
«Queda un sabor agrio»
A falta de dos intrascendentes encuentros para que la competición llegue a su fin, al valenciano no le apetece «hacer ningún balance ahora mismo porque está muy reciente el mal final de temporada. Ha sido un trago muy agrio. Se ha terminado mal. Eso es evidente. Sólo hay que ver el número de aficionados que acudieron el domingo a Chapín. Creo que ha sido la peor asistencia de público de toda la temporada. La gente no está muy contenta con nosotros y el vestuario tiene una sensación muy amarga del final del campeonato. Ha sido una lástima. El hecho es que una temporada que en principio iba a ser totalmente exitosa, al final acaba con la sensación de que ha sido mucho peor de lo que los números dicen».
Si en lugar de acabar mal, la temporada hubiera ido de menos a más todo hubiera sido muy diferente. «Eso es lógico. Ahí está el ejemplo del Numancia. Ellos en la primera vuelta estuvieron en descenso y ahora han logrado muchos puntos. Al final los dos estamos prácticamente igual, pero la sensación en Soria es que se ha hecho una temporada fantástica, y en Jerez de que se ha firmado una campaña mala. Eso es así».
Cuando se le pide un calificativo para esta campaña, responde que «desde luego ha sido rara. El buen arranque nos hizo ser optimistas, pero luego, no sólo el mal juego de la segunda vuelta, la mala suerte, los malos arbitrajes... Un cúmulo de circunstancias, todas totalmente adversas, se han juntado y nos ha perjudicado mucho. Ahora no sirve de excusa, pero eso sirve de argumento para explicar la mala segunda vuelta. Estoy convencido. Con lo mismo se podía haber hecho muchísimos puntos más».
En el plano personal no quiere ponerse nota pues piensa que «es una equivocación que cada uno haga balance individual de la temporada, eso no sirve para nada. En un equipo el balance hay que realizarlo en grupo, sino jugaría a tenis o a otro deporte en el que prime lo individual. Yo hago el mismo balance que el resto, ni más ni menos».
PUNTO DE INFLEXIÓN
«Madrid fue clave»
En Valdebebas se perdió algo más que tres puntos.«Para mí personalmete perder en Madrid fue un punto de inflexión. Creo que ha sido la derrota que más daño ha hecho, lo tengo clarísimo. El día del Recre también fue un partido que en circunstancias normales habría acabado en victoria. Supongo que yo hago lo mismo que el resto, pero te pones a pensar y cuentas con dos puntos de aquí, otro puntos de allá, las derrotas en los últimos minutos... Y es que al final nos podrían haber sobrado hasta puntos, pero todo eso ahora ya no vale de nada. Es una tontería continuar pensándolo, porque sólo sirve para sentirte peor».
Eso de que los jugadores no quieren ascender, es un comentario que se ha escuchado mucho por Jerez y que no gusta nada en el vestuario. «No voy a decir que al que más le duele se a mí y a mis compañeros, pero si puedo asegurar que no hay nadie al que le duela más que a nosotros. Como mucho lo sentirán igual que el vestuario, más no. Llevo toda mi vida jugando al fútbol para llegar algún día a Primera División, y no es la primera vez que se me ha escapado. La verdad, es que cada año que pasa, las opciones de jugar en Primera son menores, y siempre queda esa sensación de que lo has tenido ahí, de que tú también has podido llegar a Primera, pero el hecho es que van pasando los años y no te llega. Uno está dolido y muy mal, pero no puede bajar los brazos. Mientras tenga fuerza voy a seguir con la idea de llegar algún día a la máxima categoría del fútbol nacional. Eso no me lo va a quitar nadie de la cabeza, luego lo conseguiré o no, pero hasta que pueda, continuaré intentándolo».
VESTUARIO
«Demasiados rumores»
El portador del brazalete de capitán siempre ha defendido la unidad del vestuario. «Sé que han salido una gran cantidad de comentarios, pero no entiendo muy bien eso de hacer piña, porque cada uno tendrá una concepción diferente del grupo. Lo que es lógico que yo no me estoy dando besos en la boca con todos mis compañeros. Cuando termina el entrenamiento me voy a mi casa con mi familia, unos días quedo con mis compañeros, pero supongo que igual que en el resto de los trabajos. Te llevas lo mejor posible con todo el mundo, yo creo que aquí nos llevamos fenomenal tanto dentro como fuera de las horas de trabajo, pero lo que es imposible es que vayamos los 25 jugadores todo el tiempo juntos. A lo mejor alguno tiene la idea de que un vestuario unido consiste en una plantilla que pasa todo el día juntos y dándonos besos».
Ante las manifestaciones de cambio de discurso, Moreno avisa. «Siempre se intenta mejorar la temporada anterior, pero eso no está sólo en las manos de uno. Los otros equipos también cuentan, y creo que todos se van a reforzar mucho. Creo que la temporada que viene va a ser la más complicadas de los últimos seis años, por tanto hay que ser bastante cautos en ese sentido».