La selección de Brasil presentó ayer sus cartas credenciales goleando por 4-0, sin despeinarse, a una modesta Nueva Zelanda, que nunca dio sensación de poner en peligro el triunfo abultado de los actuales campeones. Ronaldo Nazario de Lima, en su 99 partido con la camiseta de Brasil, abrió el marcador al filo del descanso lo que significa para él igualar a Romario como segundo máximo goleador en la historia de Brasil (70) y confirmar el buen momento por el que atraviesa.

Otra de las favoritas dio una imagen bien distinta. Holanda no pasó del empate ante una Australia, que jugó con un hombre menos desde el minuto 61. Pero quizá lo peor para el cuadro de Marco van Basten es que tuvieron que abandonar el campo con respectivas lesiones Philip Cocu, Van Bronckhorst y Wesley Sneijder. El seleccionador holandés comentó que en principio la lesión de Sneijder era la más seria, aunque señaló que tendrán que esperar 24 horas para conocer exactamente el estado de los tres jugadores. A una semana del estreno mundialista de los tulipanes contra Serbia y Montenegro, estos no tuvieron ni los recursos ni el acierto suficiente para desmoronar el buen entramado defensivo del cuadro de Guus Hiddink.

Por su parte, los combinados de Costa de Marfil y Ghana presentaron su candidatura para hacer algo importante en este mundial venciendo con autoridad a Eslovenia y Corea del Sur respectivamente. El delantero del Chelsea Didier Drogba condujo a Costa de Marfil hacia el triunfo marcando dos de los tras goles de su equipo.