Los padres y madres del colegio Torresoto no cesan en su empeño de conseguir que la pequeña de tres años que sufre espina bífida, Aitana, pueda ser escolarizada en el centro, donde ya está su hermano. Por ello, un centenar de personas se manifestaron ayer frente la oficina de la Delegación Provincial de Educación de Jerez, junto al parque del Retiro. Armados con pitos, pancartas y megafonía leyeron un manifiesto en apoyo a los padres de la niña y corearon «Brenes admite, si no, dimite». También recogieron firmas en varios puntos de la ciudad, en la misma manifestación y en una mesa instalada en plena calle Larga. «Vuestra solidaridad y apoyo me dan fuerzas para seguir luchando. Sé que no estoy sólo», agradeció el padre de Aitana, Francisco Fernández.

Este colectivo de padres lleva pidiendo la escolarización de la niña en el CEIP Torresoto desde el pasado mes de marzo, y es que según aseguran los padres, la pequeña no aparece ni en las listas de admitidos ni en las de no admitidos algo que, según la delegación es un error que se subsanará pronto.

Respuesta de Educación

La Delegación provincial de Educación respondió ayer por escrito a las protestas de los padres de alumnos del centro. Según la delegación, «la integración del alumnado con necesidades educativas especiales está recogida en la Ley de Solidaridad en la Educación, como bien parecen conocer los padres que, de inmediato, han hecho uso de ella para aplicarla de una manera más que posiblemente insolidaria. Pareciera que no existieran ni en Jerez ni en Andalucía más niños con esas necesidades, y que la administración educativa escatimase con la escolarización adecuada de uno de esos niños». Insisten en que «son recursos limitados y pagados por todos los ciudadanos».

La Delegación Provincial de Educación asegura haber actuado «de forma prudente y responsable. Quizás convendría también explicar que esos padres sólo admiten una escolarización para su hija: la que ellos han decidido y en el colegio que quieren. Esa es la única solidaridad que parecen entender, la que empieza y acaba en ellos mismos».

Para que Aitana sea escolarizada en este centro es necesario que se instale un ascensor puesto que no puede caminar debido a la enfermedad. Según el AMPA del colegio «la Junta de Andalucía incumple la ley que le obliga a tener eliminadas las barreras arquitectónicas de todos sus edificios desde el año 2000».