Las autoridades de Senegal han interceptado en las pasadas 72 horas 19 cayucos que habían partido de las costas del país con 1.501 emigrantes clandestinos con destino a Canarias, reveló ayer en rueda de prensa en Dakar el jefe del Estado Mayor conjunto, Ousmane Sall. Las operaciones han permitido también detener a 60 traficantes de personas, entre ellos una decena de marfileños, liberianos y ghaneses, dijo Sall, que agregó que las fuerzas de seguridad senegalesas se han incautado asimismo de barriles de combustible. «Vamos a continuar con nuestra lucha para erradicar esta plaga», dijo Sall, quien señaló que toda la operación se ha hecho hasta ahora con medios propios senegaleses, pero que para mantener el esfuerzo se precisarán «recursos adicionales».

Rechazó la acusación de negligencia de las autoridades al asegurar que desde hace tiempo Senegal había iniciado acciones para contener el fenómeno pero que la amplitud del mismo justificó una intensificación de las medidas.