Soy un ciudadano, de los llamados de a pie, que quiero expresar una queja, y como bien pongo al principio de esta carta, para que la persona o las personas que se consideren que son los responsables en lo sucesivo intente solucionar, si no totalmente, dentro de sus posibilidades, lo buenamente que puedan. El pasado día 8 de los corrientes observé cómo una señora de avanzada edad sufría una caída junto a la cafetería La Vega, en la plaza Estévez, inmediatamente y por mediación del teléfono dicho hecho se puso en conocimiento de los servicios sanitarios, momentos después cuando patrullaba por dicho lugar un policía de proximidad, se le requirió informándole de lo acaecido. Este funcionario contacta a través de su equipo de radio con la sala del 091, para reiterar la presencia de una ambulancia, ya que la mujer accidentada tenía una herida sangrante en la frente.
En vista de que ya habían pasado, aproximadamente, unos cuarenta minutos y no hacía acto de presencia ningún vehículo sanitario, este funcionario volvió a contactar con la centralita de la Policía, para que urgiesen a los servicios sanitarios de su presencia en el lugar, para atender y evacuar a esta persona. Cuando se había sobrepasado ya la hora de espera, el policía contactó de nuevo con la sala del 091 informándole al operador que se pusiera de nuevo en contacto con el 061, y que le informara si tenían vehículos disponibles o no, ya que por el tiempo transcurrido, por muy lejano que se encontrase el vehículo requerido, ya la habría dado tiempo de sobra de llegar al lugar. Informándole la sala al policía, hecho éste que lo oyeron los allí presentes, de que había sido informado por la centralita del 061 que no podían enviar ambulancia alguna, porque no había; por lo que a continuación el funcionario solicitó un vehículo policial para evacuar a esta persona al hospital, personándose de inmediato un coche patrulla.
Si, como vengo observando, la publicidad que aparece en los diarios locales, y en pancartas institucionales, de que «ya somos doscientos mil», yo me pregunto: si somos la primera ciudad andaluza en extensión, somos la quinta en número de habitantes de Andalucía, también por desgracia tengo que decir que en servicios sanitarios vamos detrás de Burundi.
Con esto no quiero criticar a los profesionales del SAS o del 061, que en infinidad de ocasiones, y me consta, se juegan la vida por socorrer a personas que los necesitan, por eso en el encabezamiento pongo «a quien corresponda», y de antemano pido disculpas si hay personas o instituciones ofendidas.
Manuel García Benítez. Jerez