La falsificación de los informes médicos para el cobro ilegal de pensiones sigue dando que hablar. La Guardia Civil ha detenido a otras dos personas en el marco de la operación Karlos contra el fraude a la Seguridad Social que comenzó el pasado mes de abril en la provincia de Cádiz, los cuáles prestaron ayer declaración ante el juez que instruye el caso en la capital gaditana.

Según fuentes del cuerpo de la Guardia Civil, uno de los detenidos es el padre del ex jefe de la Policía Local de Ubrique, como presunto beneficiario del fraude, Carlos Carretero, imputado y encarcelado en el marco de la operación Halcón sobre fraude por facturas falsas.

La operación Karlos comenzó a principios de abril con la detención por parte de la Guardia Civil de diez personas como presuntos autores de un delito contra la Seguridad Social, aunque salieron en libertad provisional, algunos con fianza interpuesta por el juzgado número dos de Jerez de la Frontera, como es el caso de la mujer del torero Jesulín de Ubrique, María José Campanario, que tuvo que abonar 12.000 euros.

La madre de Campanario, Rosario Torres, declaró también la pasada semana en los juzgados de la capital gaditana como presunta beneficiaria del fraude, aunque quedó en libertad.

El titular del citado juzgado jerezano ordenó también el ingreso en prisión de un funcionario de la Unidad de Valoración e Incapacidad del Servicio Andaluz de Salud en Cádiz, identificado como F. C. P. L.

La fiscal de Delitos Económicos de la Audiencia Provincial de Cádiz, Virginia Alonso, considera que «esto no ha hecho más que empezar» y aseguró a LA VOZ que «habrá más detenidos, puesto que hay mucha gente implicada».

La operación Karlos de la Guardia Civil ha permitido desarticular una red para obtener certificados de incapacidad laboral mediante procedimientos ilegales. Hasta el momento, han sido veinte las personas detenidas.