–¿Qué siginfica la Feria para usted?
–La Feria significa muchas cosas, porque es algo muy nuestro. muy de Jerez. Para mí, la Feria es una forma de vida, una manera de echar un buen rato con los amigos y poder desconectar de los problemas de la vida diaria.
–¿Cuál es el primer recuerdo que tiene de la Feria?
–Mi primer recuerdo es de cuando tenía ocho años. Recuerdo que iba a la Feria con mi padre y mis ocho hermanos cargados de tortilla y más comida y nos la comíamos allí mismo. En aquella época la gente era más pobre y se tenía que llevar la comida de casa.
–¿Cree que ha mejorado con los años o echa de menos las ferias de cuando era un niño?
–No echo nada de menos. La Feria va a más y es mejor cada año que pasa. Y yo tengo la experiencia de haber estado en muchas otras ferias. Esta no es como la de Sevilla, donde todas las casetas están cerradas. Aquí se puede entrar a todas las casetas y puedo decir que cada año es es mucho mejor.
–¿Ha cambiado el disfrute del flamenco en la Feria?
–Es diferente. Antes iba sobre todo a Los Cernícalos, donde había muy buen flamenco. Allí se aprendía mucho, pero ahora el flamenco está en todos los rincones de la feria, no en una sola caseta.