Muchos ayuntamientos, como es el caso del de Cádiz capital, asumen el enterramiento de personas sin familiares y recursos. Según el edil de Hacienda, José Blas Fernández: «El año pasado costeamos varios entierros, de los que gran parte eran de indigentes». Muchos son reclamados finalmente por la familia, que corre con los gastos que generan los enterramientos, pero hay veces «que la familia no quiere hacerse cargo de ello».

Una figura que viene de 1995, bajo el nombre de entierro de caridad, la representaban instituciones sociales. Sus funciones, con el paso del tiempo, pasaron al Ayuntamiento de Cádiz, que es ahora la administración que se hace cargo de estos fallecimientos.