Un nuevo día amanece y el sol hace acto de presencia con más fuerza que nunca. Playa, piscina y terrazas son los placeres de un día con tal panorama. Álex Colorado, centrocampista del Xerez Deportivo, organiza el día como un dominguero especial tras el partido de sanción que tiene cumplir y que le ha hecho quedarse en Jerez sin poder viajar con el equipo.

Un día que empieza temprano y que Colorado aprovecha hasta el último minuto para hacer una escapadita entre tanta táctica y entrenamiento. Y así aprovechar al máximo el moreno que le brinda unas buenas horas de sol en Vistahermosa. Relajación y nada de deporte son las consigna cuando aterriza Álex Colorado en la playa portuense. Y es que el azulino es disciplinado y serio a la hora de acatar los mandatos del club.

Pero aunque Colorado disfrute junto a su novia de un gran domingo playero, la mente del centrocampista jerezano sigue mirando de reojo cada minuto que resta para que su equipo dispute el importantísimo encuentro ante el Polideportivo Ejido de José María Salmerón.

Empieza el día temprano

El día comenzó muy temprano para el quince del Xerez Deportivo. Bocadillo en mano, toalla y buen tiempo son los ingredientes de un buen día de playa. Colorado también capta la idea y termina por hacer acto de presencia en Vistahermosa en un día que se sale de lo habitual para el jerezano.

«La verdad es que se vive raro estos días, en las concentraciones hay otro ambiente a la hora de vivir los partidos», dijo Colorado.

Nada de deporte, por mandato del club, y un par de bañitos tras unas horas tumbado en la toalla son las primeras consignas a la hora de llegar a la abarrotada playa portuense de Vistahermosa.

Pensando en el Xerez

Se suele decir que los futbolistas lo pasan peor cuando no están en el terreno de juego y a tenor de lo visto ayer puede que sea cierto. Álex Colorado es un tipo tranquilo, sosegado, que no se altera fácilmente, pero que lleva la procesión por dentro. El centrocampista jerezano está al tanto en todo momento de lo que pasa en el resto de partidos y se interesa a cada instante de todo lo que acontece en Santo Domingo.

El azulino confiesa que «por lo general, suelo escuchar el partido con mi padre que es un enamorado y un gran aficionado del Xerez. Suelo rodearme de mi familia para vivir el partido de la forma más relajada posible pero, a veces, es complicado».

El jerezano se muestra fastidiado por no poder participar en el partido y matiza «aunque pueda hacer otras cosas durante el día siempre estoy mentalmente con el equipo».

Nervios y emoción son dos de los calificativos que definen el partido del Ejido. El mismo paralelismo se puede hacer respecto al quince del Xerez. Radio en mano y dosis de nerviosismo para seguir un partido muy importante para los hombres de Lucas Alcaraz. Sin duda, por parte del jerezano Álex Colorado no faltará el empujoncito que le falta al equipo de cara a la última parte de la temporada.