Los habituales del centro de Jerez lo conocerán. Se llama Juan, no se le recuerdan apellidos, y deambula cada día por los bares de la calle Larga, la Porvera y los alredededores de la plaza del Arenal pidiendo alguna moneda «para sus gastos». Juan, un hombre enjuto maltratado por el destino, tiene un rostro amable pero marcado por las bofetadas que suele dar una vida difícil. A veces cuenta que, en cierta ocasión, sus problemas mentales lo llevaron a intentar quitarse la vida tirándose desde una ventana. Los cordeles de un tendedero frenaron la caída y le dieron la oportunidad de seguir pateando las calles de Jerez por más tiempo. «Vivía en el Planeta Nada», responde para justificar su comportamiento de entonces. En ese astro que gira en algún rincón de la mente de Juan parecen vivir también algunos días nuestros políticos. La última perla cultivada en el patio de vecinos en el que se ha convertido el pacto entre PSOE y PSA en el Ayuntamiento de Jerez surge a raiz de la apertura de una oficina de Jereyssa anunciada por el PSA en El Torno. La tropa de Pacheco dio a conocer la noticia el 27 de abril, la de Pilar respondió al día siguiente que de eso ni mijita, y el último capítulo, de momento, en el enésimo choque frontolateral entre los socios (siempre se me escapa media sonrisa cuando los defino así) tuvo lugar ayer con la concejal andalucista Rocío Montero como prota del culebrón insistiendo en que la oficina se abre el martes. «Vaya discursión más tonta», escuchó decir a una redactora de LA VOZ al fondo de la redacción. Si y no. En efecto es una discusión propia de un pleno extraordinario del Planeta Nada, pero al mismo tiempo vuelve a dejar al descubierto las vergüenzas partidistas de las dos formaciones que sustentan el Gobierno local de esta sacrosanta ciudad. Ikea, el circuito, los presupuestos, la motorada, la feria, las vías pecuarias... y hasta una oficina de Jereyssa en El Torno. Todo sirve para practicar el deporte favorito de los últimos meses en la calle Consistorio, el 'lanzamiento libre de titulares de prensa contra el socio de Gobierno'. Cualquiera diría que estamos ya en precampaña electoral. ¿O es que lo estamos? Yo soy de los que piensa que sí, que el «corazón con dos latidos» con el que definió Pacheco el pacto 'por Jerez' (otra sonrisita que se me escapa, perdón) firmado con los socialistas bombea desde el principio en una sola dirección: los comicios municipales del año que viene. En los corrillos periodísticos y políticos (esas dos especies que nos empeñamos en vivir muchas veces de espaldas a lo que realmente interesa a los ciudadanos) se hacen ya apuestas sobre el cuándo y cómo -el por qué está claro- de la ruptura del pacto. Hay opiniones para todos los gustos, desde los que dicen que habrá novedades después de la feria hasta los que sostienen que ambos partidos apuraran hasta el comienzo, oficial, de la campaña electoral. Incluso, llega algún comentario desde dependencias municipales de una supuesta inclusión de Pacheco en las listas del PSOE para las elecciones al Parlamento Andaluz (?). Si, yo puse la misma cara. Lo cierto es que mucho tiene que cambiar el panorama para que alguien consiga mayoría absoluta en este Jerez y lo divertido vendrá cuando haya que confeccionar pactos en la próxima legislatura. Menos mal que, pese a todo, algunas cosas van saliendo y unos y otros taambién ponen esfuerzos en seguir construyendo esta ciudad, sobre todo en eso, en lo de construir. Pero no me negarán que cuando se ponen, se ponen, y es fácil imaginarlos deambulando por ese Planeta Nada al que, de vez en cuando, viaja el bueno de Juan.