En la pasada Semana Santa, cada día mas esplendida, disfrute con la presencia ¿voluntaria? en los cortejos procesionales de la Policía Nacional en misión de escolta amorosa a nuestros Sagrados Titulares. Y les cuento que goce con dicha presencia, porque me retrotrae a la década de los años setenta del pasado siglo; cuando el que les cuenta, y acompañado de un buen número de compañeros: Miguel, Antonio, Rafael, Pepe, y muchos más, nos ofrecíamos ¿voluntarios? para prestar este singular servicio de escolta a nuestro señor Jesucristo y su queridísima Madre en cualquiera de sus hermosas adoraciones.

Me dirán que en aquella época el servicio era de obligado cumplimiento, pero ello no era óbice para que un buen número de compañeros nos ofreciéramos para prestar dicho servicio.Como hoy en día tengo conocimiento del cariño y buen trato que reciben mis compañeros en todas las hermandades, a las que acuden con voluntad de servicio, desde estas líneas quiero agradecer a todas ellas y en particular a la Hermandad de la Santa Cena dicha actitud, para su hermano mayor, Don Manuel Natera un fuerte abrazo de gratitud de un cofrade de toda la vida. Y para la asociación Santo Ángel, mi más sincera felicitación por el servicio prestado.Que Cristo Rey y Maria Santísima de la Estrella sean siempre la guía hacia el cielo de todos los jerezanos.

Juan Espinosa Castro. Jerez