Las organizaciones sectoriales del Marco de Jerez acogieron ayer con optimismo la noticia de que en dos meses habrá un Plan Estratégico del vino, sobre todo porque «es lógico que nos adelantemos a los acontecimientos que nos marcará Europa y que estemos preparados para los requisitos que establecerá la OCM». Fuentes de las asociaciones de viticultores reconocen que el plan nacional puede ser «exigente» e incluso «duro» para sus intereses, pero admiten que «cualquier reestructuración que pongamos en marcha con previsión hará que luego el golpe sea menor». Además, dejaron claro que la elaboración de este documento servirá al MAPA para unificar criterios para la negociación de la OCM, porque «ya era hora de que acudiéramos a Bruselas con el trabajo hecho».