Zinedine Zidane , centrocampista francés del Real Madrid, se entrenó ayer en solitario, intercalando el trabajo de campo con el gimnasio, y como confirmó su técnico, Juan Ramón López Caro, sigue siendo duda para jugar ante el Málaga el domingo en el estadio Santiago Bernabéu. Zidane se resintió en el entrenamiento de unas dolencias que arrastraba en el tobillo derecho, en el que sufre un esguince, según el parte médico. Ayer, en la segunda sesión a puerta cerrada consecutiva planificada por López Caro, Zidane se ejercitó al margen del grupo con series de carrera continua sobre el césped y ejercicios específicos de recuperación en el gimnasio. «Está haciendo un trabajo de tratamiento. A ver si somos capaces de poder recuperarle, él está ilusionado con que sí y ojalá entre hoy y mañana se recupere y esté en perfecto estado. Pero no lo puedo garantizar», señaló López Caro.
Habla el miércoles
A la espera de que Zidane confirme su decisión de seguir o no jugando al fútbol la próxima temporada, un tema que quizás aclare el próximo miércoles cuando romperá su silencio con una rueda de prensa, el centrocampista francés puede disputar, si se recupera, su penúltimo partido oficial en el estadio Santiago Bernabéu ante su afición. Si al final el francés se cae de la convocatoria para el partido frente al Málaga, el partido contra el Villarreal podría ser la última vez que el maestro se vistiese de corto en Chamartín.
A puerta cerrada
López Caro probó sin la presencia de público ni medios de comunicación durante una hora y quince minutos la táctica y varios aspectos para preparar el encuentro ante el Málaga del próximo domingo en el estadio Santiago Bernabéu. Aunque aún está por decidir, en principio el técnico recuperará a Guti para dirigir al equipo y está pendiente de la evolución de Zidane. Con la presencia de los canteranos Rubén De La Red, Jurado, Barral y Soldado, López Caro exigió el máximo a sus jugadores para que rompan la racha de cinco empates en los últimos seis encuentros.