La cadena Jale-Monasterio continuará con su incesante expansión por Andalucía para los próximos años. Según anunció su consejero delegado, Alfred Fischbach, para el 2010 el grupo gaditano quiere ampliar hasta la decena sus establecimientos en Andalucía. Fischbach hacía ayer balance de los ingresos que ha acumulado la empresa. Según se informó, la cadena generó durante el pasado año un volumen de negocio de más de 11 millones de euros, lo que supuso un crecimiento del 15% con respecto al ejercicio anterior.
Hoteles Jale amplió su oferta en 2005 con la construcción de tres nuevos establecimientos: el Hotel Al-Mihrab de Córdoba, el Hotel Plaza de Toros de Almadén (Ciudad Real) y el Hotel Colón Costa Ballena, en Rota, que supuso una inversión cercana a los 30 millones de euros. El consejero delegado apuntó que, durante este año, se está estudiando la posibilidad de ampliar su «abanico en zonas de las provincias de Andalucía Oriental».
Turismo vacacional
Además, Fischbach señaló que las preferencias actuales de la empresa hotelera se centran en crear nuevos establecimientos en el litoral gaditano en zonas como Conil, Vejer o Barbate, enfocados al turismo vacacional. De esta forma, adelantó que la cadena apostaría por construir también nuevos campos de golf en la provincia de Cádiz. «Es un circuito muy importante y que atrae a turistas de alto nivel», manifestó el consejero de Jale.
Al mismo tiempo de estos planes de expansión, Jale seguirá en su línea de desarrollar complejos hoteleros en antiguas fincas y monumentos pendientes de rehabilitar como así hiciera en 1989 con el Hotel Monasterio San Miguel y posteriormente con el Duques de Medinaceli de El Puerto. Según indicó Fischbach, ya existen varias peticiones de diferentes ayuntamientos para que el grupo construya uno de sus establecimientos mediante la recuperación de antiguos inmuebles como ermitas, conventos o palacios. Aunque no se quiso precisar cuáles serían esos lugares, Fischbach perfiló que podrían situarse «entre Jerez y Los Barrios».
En cuanto a la procedencia de los turistas que se hospedaron en alguno de los establecimientos del Grupo Jale, un 80% fueron turistas nacionales (muchos de ellos atraídos por la actividad de congresos de profesionales que desarrolla la cadena), y el 40% restante, de origen extranjero.