El delegado municipal de Deportes, Alfonso García, explicó ayer que la remodelación de los campos de fútbol-base se emprenderá por parte de la Gerencia Municipal de Deportes (GMD) «el día después de finalizar la actual competición de fútbol-base para que las instalaciones estén perfectamente homologadas el 1 de septiembre por los organismos federativos». Cabe recordar que la Federación Andaluza ha amenazado con cerrar cinco campos en Jerez (Anexo de La Juventud, La Granja, San Telmo, Liberación y San Benito), si no se realizan una serie de obras, como la protección de los accesos a vestuarios o el vallado de los campos.

Tras la comunicación por parte de la Asociación de Clubes de Fútbol-Base al respecto y habiendo visitado ya las instalaciones, el delegado ha declarado que «hemos recabado una serie de informes para actuar de manera urgente en dichos campos». Además, García ha continuado diciendo que « entendemos que nuestros campos de titularidad municipal son mejorables y vamos a priorizar esas obras en cuanto acabe la liga en curso».

Para el máximo responsable del deporte municipal, las obras no se podrían efectuar ahora, ya que «si ahora nos ponemos a actuar provocaríamos la interrupción de la competición o que los equipos tuvieran que buscarse otros campos, así que vamos a arreglar esos campos para que estén en perfecto estado, pero más adelante, que nadie tenga dudas».

El delegado de Deportes recuerda que, en el pasado «ya hemos actuado en zonas como La Juventud y en San Telmo a comienzos de esta temporada con la renovación de su albero, y lo mismo vamos a hacer en esos campos que necesitan la homologación de manera urgente; es decir, La Granja, San Telmo, La Juventud, San Benito y Liberación».

Ciudad Deportiva

Según García, «el arreglo de La Granja además se complementará con la construcción de la futura Ciudad Deportiva del mismo nombre, que obviamente no tiene que ver con la futura ciudad deportiva del Xerez, y que en este caso será un complejo para el fútbol-base, como hemos explicado días atrás a los propios vecinos de la barriada». De esta manera, Alfonso García intenta quitar presión al asunto.