Dos jóvenes de Madrilejos (Toledo) de edades comprendidas entre los 20 y los 25 años, permanecen ingresados en estado grave en la Unidad de Quemados en el Hospital Universitario de Getafe (Madrid) después de que el domingo por la tarde sufrieran quemaduras internas y externas al beber chupitos de absenta, bebida alcohólica con una graduación de 60 grados.

El suceso ocurrió en el bar La Tasca, de Madridejos, cuando los dos heridos procedían a beber absenta mediante un procedimiento que se ha puesto de moda: se arroja azúcar sobre el líquido y se le prende fuego como si se tratase de una queimada antes de ingerirlo. Sin embargo, la tarde de ocio se tornó en tragedia cuando la botella de absenta se vertió envolviendo en llamas a los dos jóvenes.

La madre de uno de ellos, María Antonia Sánchez, relató que su hijo padece heridas menos graves, ya que pudo cubrirse la cara con una camiseta en el momento del incidente, lo que evitó que se produjeran daños mayores.