El pasado fin de semana llamó poderosamente la atención el hecho de que Víctor espárrago dejara fuera de la convocatoria para el partido ante el Betis al portugués Mario Silva, toda vez que no podía contar con Raúl López, lesionado a causa de una tendinitis. Espárrago afirmó en la rueda de prensa que Silva se había quedado fuera por lesión, algo que volvió a repetir ayer tras el primer entrenamiento de la semana.
Sin embargo, el futbolista luso estaba en perfectas condiciones para jugar, pero su no inclusión en la lista de convocados viene de antes. Concretamente del miércoles pasado, cuando Mario Silva se retiró voluntariamente de la sesión de entrenamiento en El Rosal alegando que tenía molestias en la espinilla. Al día siguiente volvió al trabajo con absoluta normalidad y esas molestias prácticamente olvidadas. Esto no debió gustar mucho al técnico, que decidió entonces dejarlo fuera de la convocatoria.
La controversia llegó cuando el técnico uruguayo explicó que la decisión fue por motivos médicos en lugar de técnicos, algo que no es así ya que las mínimas molestias que podía tener el futbolista son absolutamente normales y de hecho cada domingo hay jugadores que disputan los encuentros en las mismas condiciones sin ningún problema.
Ayer, a la conclusión del entrenamiento, Espárrago volvió a afirmar que Mario Silva no estaba en condiciones de ser convocado, mientras que el jugador abandonó El Rosal visiblemente enfadado y se negó a acudir a la rueda de prensa para explicar su versión del asunto.