Manolo Preciado tiene previsto introducir varios cambios en su equipo para tratar de derrotar al Barcelona, que llega sin Ronaldinho, y sumar así unos puntos que acercarían a los cántabros a su objetivo de la permanencia.

Tras vencer hace tres jornadas al Valencia en El Sardinero, con lo que el Racing conseguía su tercera victoria de la temporada en casa, los cántabros no sólo no enderezaron el rumbo, sino que han desplegado un pobre juego, incluso en los desplazamientos, baza ésta en la que venían mostrándose sólidos durante toda la temporada.

Preciado ha anunciado que presentará varios cambios y a tenor de lo ocurrido en los entrenamientos de esta semana, aunque afectarán a todas las líneas, puede ser el centro de la zaga donde todo varíe con el paso a la titularidad de Moratón y Oriol, en detrimento de Garay y Pablo Alfaro.

La relajación, el peligro

Con la Liga muy encarrilada pese a encadenar dos empates consecutivos (Málaga y Real Madrid), el Barcelona vuelve a la competición liguera sin Ronaldinho, pero con la intención de aparcar temporalmente su preparación de las semifinales de la Liga de Campeones para sentenciar cuanto antes el título.

Por ello, el gran enemigo del Barcelona en Santander puede ser su propia relajación, en un estadio donde sufrió una abultada derrota (3-0) hace dos años.