El luto por la muerte de la reina de Inglaterra se extiende por todo el mundo

El imponente Cristo de Río de Janeiro reflejaba los colores de la bandera británica. La consternación mundial podría medirse hoy alzando la mirada al cielo. Desde Washington hasta las islas Fiji, pasando por Tokio o por Berlín las banderas ondean a media asta mientras los mandatarios de medio mundo recuerdan a la reina. El presidente de los EEUU firmaba el libro de condolencias en su honor desde la Embajada británica. Quien no podía contener la emoción era el primer ministro de Canadá, que confesaba echarla de menos. Incluso la Ucrania en guerra le dedicaba su tiempo y su cariño. El legado de la reina de Inglaterra brilla hoy traspasando todas las fronteras.- Redacción-