Desgaste y semiparálisis operativa
EL ANÁLISIS TÁCTICO DEL GENERAL (R) PITARCH (11/04/2023)
El bando ucraniano, en actitud defensiva, parece esperar el rearme procedente de países de la OTAN, antes de poder desarrollar la anunciada contraofensiva
Algunas consecuencias de la entrada de Finlandia en la OTAN

Prosigue la tónica de desgaste y semiparálisis de las operaciones en el teatro. El bando ucraniano, en actitud defensiva, parece esperar el rearme procedente de países de la OTAN, antes de poder desarrollar la anunciada contraofensiva. Al mismo tiempo, las tropas rusas se fortifican en las posiciones alcanzadas y sus acciones ofensivas se focalizan en Bajmut y los alrededores de la ciudad de Donetsk.
En Bajmut, a pesar de que el bando ruso (el grupo Wagner), hace una semana, voceara su conquista, tal no se ha dado. Siguen los encarnizados combates en el centro de la ciudad casa por casa. En el óblast (provincia) de Donetsk la iniciativa rusa se dirige principalmente contra Marinka y Avdivka, bastiones urbanos ya casi despoblados, situados, respectivamente, al oeste-suroeste y norte de la capital del óblast. La finalidad de tales ataques, que las tropas rusas no han conseguido todavía, es alejar el frente de combate de la capital del óblast.
No ha tardado mucho Rusia en reaccionar frente a la reciente adhesión de Finlandia al Tratado de Washington. A pesar de que, en mayo de 2022, tras conocerse las intenciones de Finlandia y Suecia de entrar en la Alianza Atlántica, Putin afirmara que esa pretendida adhesión «no generaba una inmediata amenaza contra Rusia», ahora, consumada la entrada de Finlandia y congelada, por Turquía y Hungría, la de Suecia, parece que los criterios han cambiado.
Moscú, más allá de alardes verbales, no puede ignorar que la frontera rusa con la OTAN se ha duplicado, pasando de 1.200 km a 2.500 km. Por ello, la primera medida operativa de Moscú parece ser reforzar sus medios y misiones de vigilancia fronteriza, así como desarrollar un mayor esfuerzo de defensa aérea y antiaérea, para proteger los intereses rusos al este de la nueva frontera 'enemiga'. Eso, imperativamente, se traducirá en un debilitamiento de las defensas rusas en otras zonas del teatro de operaciones. En este sentido hay que presumir la veracidad de las declaraciones del Mando antiaéreo ruso de estar desplegando nuevos sistemas antiaéreos (contra aviones, misiles y drones, como el todavía inédito RLC-MC Valdái,) para protección de las infraestructuras críticas rusas alcanzables desde suelo finlandés.