Yoga en lo alto de una azotea como remedio contra el estrés

En lo alto de una azotea y con el único sonido de una voz de fondo, más de treinta personas se evaden de sus problemas. Allí arriba, en un edificio de Brasil se aíslan del mundo, se relajan y controlan su respiración. En definitiva: practican yoga. Están en Capao Redondo, una de las zonas más humildes y peligrosas de Sao Paulo. Un barrio donde está presente la violencia y el alboroto en las calles, así que la única manera que tienen de desestresarse es acudir a estas sesiones, que duran de media tres horas. Liderando el grupo está la instructora, una mujer entregada que les ofrece su sabiduría de forma totalmente gratuita. Ella asegura que todos los días "recibe testimonios sobre las clases y que ver que la gente está contenta es su mejor forma de pago". También asegura que "estar con ellos y traerles un poco paz a sus vidas, es lo que le hace feliz".