Los venezolanos se quedan sin Kleenex ni Scottex
La empresa que produce los productos de aseo, Kimberly Clark, anunció ayer la suspensión «indefinida» por el «deterioro de las condiciones económicas y del negocio» en el país
![La sede de la compañía Kimberly-Clark en Maracay, Venezuela](https://s3.abcstatics.com/media/internacional/2016/07/11/kimberly-clark-keQG--620x349@abc.jpg)
La compañía estadounidense Kimberly Clark ha anunciado este lunes la suspensión «indefinida» de sus operaciones en su sucursal de Venezuela , debido al «deterioro de las condiciones económicas y del negocio» en el país.
«Todas las operaciones en las oficinas en Caracas, junto con las de la planta y el Centro de Distribución de Maracay, han sido suspendidas indefinidamente y Kimberly-Clark no seguirá produciendo, comercializando ni vendiendo sus líneas de productos de consumo masivo e institucional , mientras esta suspensión esté en vigor», dijo la firma en un comunicado.
Kimberly Clark, que es una de las principales empresas productoras en Venezuela que proporcionaba productos de higiene personal a los ciudadanos, ha anunciado la suspensión de su actividad por el «deterioro de las condiciones económicas y del negocio» .
«Esta decisión se ha tomado después de años en los que la compañía ha procurado hacer frente a complicadas circunstancias más allá de su control, como la inhabilidad para comprar materia prima , lo que en los últimos dos meses ha ocasionado que la mayoría de las líneas de producción cierren», asegura el comunicado.
Asimismo, se expresa que tal decisión «es muy difícil», debido a que la compañía es consciente del esfuerzo de sus trabajadores «frente a crecientes retos para mantener el negocio funcionando».
La firma aclara también que si las condiciones económicas en Venezuela cambiaran «evaluará sus opciones en relación a la viabilidad» de volver a operar en el país caribeño y añade que «se mantiene comprometida al crecimiento del resto de sus operaciones de negocio existentes en Latinoamérica».
Asimismo, el portal web de la emisora Unión Radio ha reseñado que unos 200 trabajadores directos de dicha empresa quedaron sin empleo el viernes.
Las empresas en Venezuela necesitan divisas para poder adquirir la materia prima para producir.
Desde 2003 en el país petrolero se mantiene un control cambiario que deja en manos del Estado el monopolio de la administración de divisas del país , que son vendidas a través de un engorroso sistema administrativo y para un abanico de determinados supuestos.
En los últimos meses se produjo un cuello de botella en la entrega de divisas a diferentes sectores económicos que ha afectado a todos los sectores en su oferta y producción.