Tiroteado por la Policía cuando regresaba de la escuela

Las 190 páginas del informe son un paseo por las supuestas atrocidades cometidas por el chavismo desde que estallaron las protestas en febrero de 2014. Aunque muchas de ellas han sido ya denunciadas públicamente, la recopilación de ellas en el documento supone un compendio estremecedor.

En el capítulo titulado «otros casos de asesinato desde enero de 2015», se recoge, entre otras muchas, la muerte el 24 de febrero de este año en San Cristóbal de Kluiverth Roa . Este «boyscout» de 14 años volvía a casa tras su jornada escolar cuando se topó con una protesta juvenil en la que una muchacha había resultado herida y a la que intentó socorrer. En ese momento, un agente motorizado de la Policía Nacional Bolivariana llegó hasta él y lo golpeó repetidamente. Según el relato presentado al TPI , la paliza no cesó hasta que otro agente presente le descerrajó a Roa un disparo en la cara, que quedó desangrándose sobre el asfalto. También en febrero, siempre según el informe, cinco jóvenes participantes en manifestaciones en diferentes puntos del país desaparecieron sin dejar rastro. Sus cadáveres aparecieron poco después con claros signos de tortura y con un balazo en el rostro.

Daniel Frías Pinto, de 20 años, y Alejandro García, de 22, aparecieron en Zulia maniatados. John Barreto, de 21 años, fue hallado en Táchira. Yasmin Tovar, de 23, y Luis Aranyi García, de 21, fueron localizados en Catia, Caracas. Los familiares de Yasmin Tovar recalaron en su búsqueda en el complejo caraqueño conocido como el Helicoide, sede del Sebin (Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional) y dijeron haber sufrido una secuencia propia del Chile de Pinochet. Se les dijo que Tovar estaba allí pero no era posible verla. Volvieron el día después y se les dijo que la joven no se encontraba en las instalaciones. Lo siguiente fue encontrarla en la morgue.