Tercer intento en un mes para renovar los principales puestos de poder en la Unión Europea
A la tercera cumbre europea en un mes será la vencida... O puede que no. Toca renovar los...
A la tercera cumbre europea en un mes será la vencida... O puede que no. Toca renovar los principales puestos de poder en la Unión Europea y el rompecabezas para mantener el equilibrio de fuerzas políticas, estados, peso geográfico e incluso sexo de los elegidos sigue siendo de difícil resolución a esta hora. Es más, no se descarta que esta reunión extraordinaria siga sin dar salida al laberinto de nombres que arranca por un puesto de decisión ineludible en tiempo: el de la presidencia del Parlamento Europeo que se constituye el próximo martes y que, según fuentes diplomáticas, apunta a un candidato del Partido Popular europeo, lo mismo que el del responsable de política exterior. Lo negociado estos días en la cumbre del G-20 en Osaka, Japón, y lo que hoy deparen las reuniones multilaterales y bilaterales, como la de esta mañana entre Sánchez y Tusk, o la de esta tarde del presidente español con Merkel y Macron, entre otras paralelas, marcarán unas designaciones, con Borrell o Calviño como candidatos, no exentas de recelos. Frans Timmermans, socialista neerlandés, vuelve a sonar con fuerza para sustituir a Juncker como presidente de la Comisión Europea, de la que aún no se descabalga, eso sí, por los populares, al alemán Manfred Webber. Sin descartar tampoco al negociador del Brexit, Michel Barnier o, incluso, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde. Más abierta aún parece la sustitución del polaco Donald Tusk al frente del Consejo Europeo, con aspiraciones reales para los liberales. Todo a la espera también de otro puesto y nombre clave, el del sustituto del italiano Mario Draghi al frente del Banco Central. Decisiones lejos de resolverse aún, según revelaba este fin de semana el propio Tusk, que podrían llevarnos, quién sabe, hasta otoño.