Raúl Castro, reelegido al frente del Partido Comunista de Cuba por otros cinco años
El líder cubano mantiene a la vieja guardia entre los cargos dirigentes, entre ellos a su segundo, Machado Ventura, de 85 años
Pocos cambios en la cúpula dirigente cubana. Bajo la mirada de Fidel Castro , el VII Congreso del Partido Comunista de Cuba ha anunciado este martes la reelección de su hermano y sucesor Raúl Castro, de 84 años , como primer secretario de la organización para el próximo lustro. Además, ha ratificado en el cargo a buena parte de los dirigentes de la vieja guardia, entre ellos, el segundo secretario, José Ramón Machado Ventura, de 85 , a pesar de que se había especulado con que pudiera ser relevado.
La composición del Comité Central y del Buró Político del partido, los principales órganos directivos del partido único que rige los destinos de la isla, sigue el criterio anunciado por Raúl Castro en su discurso de apertura del congreso, en el que abogó por “no hacer las cosas corriendo”. En ninguno de estos dos órganos figura por el momento su hijo Alejandro , al que muchos apuntan como continuador de la dinastía en el poder desde hace 57 años, aunque su posible nombramiento como ministro del Interior le podría situar como hombre clave en el futuro. El actual ministro de esta cartera, Carlos Fernández Gondín , que al parecer sufrió un "problema de salud" tras un ataque informático, no aparece tampoco en la lista, por lo que se apunta que su puesto lo ocuparía el hijo del presidente del país y primer secretario del PCC.
Según la presidenta de la Comisión de Mandato del Congreso, Emilia Neuri, la encargada de anunciar los nombramientos, todos los candidatos obtuvieron un respaldo superior al 99,6% de los votos .
Tras su reelección, Raúl Castro dijo en su discurso de clausura al millar de delegados reunidos en La Habana que “uno no sabe dónde meter la cara cuando lo elogian tanto” , al tiempo que dijo ser “uno más, igual que ustedes”. En el Buró Político, formado por 17 miembros, hay cuatro mujeres, una cifra que el propio Castro admitió que es aún “discreta”.