La población tiene que hacer colas durante horas para poder adquirir algunos de los productos de primera necesidad. Muchas veces cuando llegan, ya se han agotado. Pocos productos y racionados, así funciona la compra diaria de los venezolanos en productos de alimentación e higiénicos. La captahuella, es uno de los sistemas de control para que los ciudadanos no adquieran productos más de una vez el mismo día en las tiendas. Muchos supermercados de Venezuela están sufriendo el desabastecimiento de alimentos desde hace meses, lo que provocó que el Parlamento declarara crisis alimentaria nacional. La escasez de medicamentos es otra de las tristes realidades que sufre el país, pues dificulta muchos tratamientos. En la imagen, un grupo de ciudadanos protestas por la falta de determinados medicamentos. Estanterías vacías en una farmacia se ha convertido en algo muy frecuente en Venezuela. Las últimas restricciones han tenido que ver con los cortes de luz eléctrica durante varias horas al día. En la imagen, una niña estudia alumbrada por una vela. Los negocios también se han visto afectados por estos cortes de luz. Algunos han optado por cerrar durante el tiempo que dura, mientras otros aguantan con velas para poder hacer alguna venta.