La policía boliviana ha recogido 3.300 cadáveres en casas y calles desde abril

La escena en esta calle de La Paz, Bolivia, hiela la sangre. El cadáver de un joven yace al lado de una mujer que lo llora y que ha tenido que avisar a la policía para que, ante el colapso del sistema sanitario, se haga cargo de él. No es una imagen extraordinaria. Desde abril, la policía boliviana ha recogido tres mil trescientos cadáveres en casas y calles de todo el país, el 80 por ciento de ellos con una sintomatología previa compatible con la Covid. Las brigadas especiales, como la de la ciudad de El Alto, han sufrido hasta quinientos veintisiete contagios entre sus filas. Las cámaras han grabado uno de los momentos más duros que ha vivido un agente: la notificación de la muerte de un bebé de apenas unos meses. Las cifras oficiales de fallecidos en Bolivia no reflejan en absoluto esta situación.-Redacción-