Militares venezolanos, que participaron en la revuelta del 30 de abril, escapan de la embajada de Panamá en Caracas
Son 16 oficiales de la Guardia Nacional Bolivariana que huyeron sin rumbo conocido, pero se encuentran fuera del territorio nacional
El gran escape de los militares disidentes venezolanos se anuncia por carta. El teniente coronel de la Guardia Nacional Bolivariana, Ilich Sánchez, afirmó en una carta que un grupo de militares se escaparon de la Embajada de Panamá en Caracas, donde estaban asilados desde el pasado 30 de abril por la frustrada revuelta militar.
«Nos encontramos tranquilos y en buen estado de salud, fuera del territorio nacional , eternamente agradecidos con la Embajada de Panamá en Caracas por garantizar a lo largo de estos meses nuestros Derechos Humanos, apegados a diferentes tratados internacionales», dijo Sánchez en la breve carta que circuló este lunes en las redes sociales.
Juan Guaidó también lo anunció por su cuenta de Twitter:
Informo al país que los militares patriotas del 30 de abril se encuentran en libertad, luego de que logramos con éxito la salida de los funcionarios que estaban en la Embajada de Panamá. Siempre protegeremos a quienes se pongan del lado de la constitución.
— Juan Guaidó (@jguaido) December 10, 2019
Sánchez fue uno de los 16 militares que encabezó el alzamiento cívico-militar el pasado 30 de abril en el marco de la denominada «Operación Libertad» que promovió el presidente (E) Juan Guaidó y el dirigente político Leopoldo López, ambos fundadores del partido Voluntad Popular.
El teniente coronel también era el comandante del Destacamento 432 de la Guardia Nacional (GNB) y jefe de Seguridad de la Asamblea Nacional antes de su participación en el movimiento militar.
La agencia AP logró entrevistar a Sánchez en exclusiva quien relató las condiciones en que permanecieron refugiados durante siete meses en la sede diplomática de Panamá. «Durante siete meses, con los nervios de punta, durmieron de día en una estrecha habitación sobre el piso frío, pasando las noches rezando, levantando pesas hechas con jarrones de agua y viendo por la ventana de la misión diplomática, temerosos del espionaje oficial», dice el cable.
Los tenientes coroneles Illich Sánchez, de 41 años, y Rafael Soto, de 43 años, se negaron a revelar exactamente cómo o cuándo salieron de Venezuela y dónde se encuentran. Sin embargo dijeron que viajaron en grupos pequeños como parte de una «operación militar» clandestina que contó con el apoyo de docenas de soldados de rangos bajos y sus comandantes.
«Salimos de Venezuela, pero nuestra lucha para restaurar la democracia sigue», dijo Sánchez en entrevista desde un lugar secreto. La narrativa hasta ahora secreta de cómo Sánchez y Soto lograron engañar a sus superiores y tramar una revuelta contra Maduro refleja el grado de descontento y temor entre las fuerzas armadas venezolanas, en momentos en que el presidente venezolano se aferra al poder pese a duras sanciones económicas estadounidenses impuestas a raíz de elecciones que Maduro dice haber ganado pero que son ampliamente consideradas fraudulentas.
Noticias relacionadas