Un hombre se reencuentra con sus padres biológicos en China tras haber pasado 32 años secuestrado
Una prueba de ADN y herramientas de reconocimiento facial han posibilitado dar con el joven que fue secuestrado en 1988
Un hombre secuestrado cuando solo era un bebé se ha reencontrado con sus padres biológicos tras 32 años separados , todo gracias a un informe a la policía y al uso de herramientas de reconocimiento facial.
Los hechos tuvieron lugar en el año 1988, según relató la oficina de seguridad pública de la ciudad en un comunicado. El joven Mao Yin tenía dos años en cuando fue llevado contra su voluntad frente a un conocido hotel de Xi'an, en el centro de China.
Tras el suceso, el niño fue vendido a una pareja sin descendencia que vivía en Sichuan, una ciudad vecina al suroeste de la región, y que lo crió como si fuera su hijo.
Finalmente, el lunes 18 de mayo, Día de la Madre en China, el joven ha podido conocer a sus padres biológicos durante una emotiva reunión celebrada este lunes en la que también han estado presentes los medios de comunicación.
Su madre, Li Jingzhi, ha contado a la televisión pública de CCTV que tras la desaparición del pequeño, renunció a su trabajo y distribuyó sin éxito más de 100.000 anuncios de «se busca».
Una prueba de ADN ha confirmado que era él
Su madre nunca perdió la esperanza y este año la situación dio un giro de 360º . Durante el mes de abril la policía recibió un informe en el que se detallaban que un varón de Sichuan había comprado un niño en los alrededores de Xi'an allá por el año 1980.
Siguiendo esta nueva pista, las autoridades utilizaron una técnica de reconocimiento facial para envejecer artificialmente una foto de la infancia de Mao Yin, ha explicado la televisión nacional de CCTV.
Una vez realizado el proceso, la instantánea se comparó con la base de datos nacional de imágenes de pasaporte para encontrar a todas aquellas personas que tuvieran características similares .
De esta manera, la policía dio con el rastro de Mao Yin en Sichuan, donde regenta un negocio de decoración de interiores. Finalmente, una prueba de ADN confirmó que él era el niño secuestrado.
Creció sin saber que había sido secuestrado
Tras preguntarle sobre si alguna vez sospechó algo al respecto, el joven ha confesado a los medios que creció sin saber que había sido secuestrado .
«No quiero que nos deje más. No dejaré que nos deje más» , ha asegurado su madre biológica Li Jingzhi durante el reencuentro, siempre sosteniendo con firmeza la mano de su hijo.
Por su parte, Mao Yin ha expresado su deseo de mudarse a Xi'an para vivir con sus padres biológicos.
Durante la última década, las autoridades chinas han ayudado a más de 6.300 niños secuestrados a encontrar a sus familias gracias a pruebas de ADN, según la agencia oficial de noticias del país.
La política del hijo único fomentó la práctica del secuestro de menores, sobre todo varones, durante la década de los 80. A parte de ser vendidos a familias chinas o extranjeras sin hijos, algunos también fueron explotados sexualmente u obligados a hacer trabajos forzados.
Noticias relacionadas
