Francia: continuidad o populismo
La fábula de la liebre y la tortuga acecha a un Emmanuel Macron que llega a estas presidenciales...
La fábula de la liebre y la tortuga acecha a un Emmanuel Macron que llega a estas presidenciales con Marine Le Pen pisándole los talones. Confiado en ganarse su reelección de calle y volcado en su papel de estadista internacional en la crisis de Ucrania, el presidente francés entró tarde en una campaña, muy bien aprovechada en cambio por la líder de Reagrupamiento Nacional. Le Pen, a quien los sondeos dan entre tres y un punto en intención de voto por debajo del presidente, ha moderado su imagen, gracias en parte a la comparación con el otro candidato de derecha aún más extrema, Eric Zemmour. Frente a sus lazos con el Kremlin y algún punto de su programa que haría las delicias de Putin, como la retirada de Francia del mando integrado de la OTAN, pesa más a su favor el descontento social. Si a esto unimos, los antipáticos planes de Macron para elevar la edad de jubilación o restringir el subsidio del paro, tenemos el escenario perfecto para una segunda vuelta de infarto entre el presidente y Le Pen. Los votantes de los candidatos descartados hoy, con una abstención al alza como factor determinante, decidirán entonces el futuro de Francia y de la Unión Europea.